En una nueva etapa del Cine Club Mercedes, ha dado curso al ciclo “El otro cine”, en alusión a que es en este ámbito en donde se puede disfrutar de las películas que no están inmersas en el circuito comercial.

De acuerdo a lo informado la intención es dedicar cada mes a un estilo, un género, un actor o una actriz, en fin, un tema que sirva de hilo conductor para ensamblar los films que se proyecten, y que haga reflexionar sobre las distintas perspectivas que puede dársele a una misma temática.

El mes de septiembre será dedicado a la ciencia ficción, como formato de pensarnos como sociedad y se proyectarán cuatro películas de colección: Fahrenheit 451, Blade Runner, 1984 y Solaris.

Cada semana se informará qué se proyectará ese jueves, y como siempre, las características de las películas. “Esperamos satisfacer las expectativas del público en general, y romper con la tradición de que este espacio es para una "elite" de entendidos. Nosotros apostamos a que sea el ámbito en que puedan encontrarse todos aquellos que aman profundamente el cine”, dijo Nicolás Boffi por parte del Cine Club Mercedes.

Este primer jueves de septiembre, entonces, se verá acompañada de vino y empanadas la película “Fahrenheit 451” (Francia, 1966), dirigida por François Truffaut y con la actuación de Julie Christie y Oskar Werner, entre otros.

En la película se cuenta cómo el gobierno de un país dictatorial ha decidido que la lectura es nefasta para el ser humano. Ordena a una brigada especial que proceda a quemar todos los libros. Es a lo que se dedica Montag aleccionado por su mujer. Un día conoce a Linda que desafía esa ley y bajo su influjo él comienza a leer. Se trata de una película que muestra un mundo deshumanizado. Por una parte, hombres esclavizados por la televisión y por la otra hombres libres vagando bajo un cielo gris. El amor y la ternura están ausentes.

Único film de Truffaut en inglés. Está basado en la novela homónima de Ray Bradbury. Describe una sociedad del futuro en la cual los libros son prohibidos. Los bomberos trabajan sólo para encargarse de quemarlos. El protagonista, interpretado por Oskar Werner, el Jules de Jules y Jim, es  precisamente uno de ellos. El descubrimiento del placer de la lectura lo obligará a replantearse su situación. El filme posee excelentes ideas como los créditos recitados al principio, ya que no se puede leer; o las personas libros que han memorizado cada una un libro diferente para así asegurar la supervivencia de la literatura y que le dan al final un tinte lírico.