El presupuesto municipal mercedino trae el “impuestazo” bajo el brazo. El intendente  Selva quiere un aumento de tasas que ronda en promedio un 54%. Con la aprobación del presupuesto, ha dado el primer paso en esa dirección. Los impuestazos no han servido para resolver los problemas de los trabajadores y vecinos. No hay un plan de obras para las barriadas ni de viviendas para encarar el enorme déficit habitacional que tiene el municipio.

Al presupuesto de Selva (alineado con Massa) lo votó el kichnerismo local de La Cámpora (Ustarroz) que la juega de “opositor”, y la mayoría de la oposición patronal.

Los camporistas tiraron la chancleta votándole a Selva el programa de gobierno para el 2013. Para disimular su disciplinamiento, La Cámpora propuso consignar un aumento del 20% en el salario municipal. Los camporistas son el jamón del medio del ajustazo de Selva y el techo salarial de miseria que quiere imponerle Cristina a los “acuerdos paritarios”. Los municipales mercedinos están entre los peores pagos de toda la provincia.

El Partido Obrero mercedino denuncia el impuestazo y plantea la apertura de los libros para investigar las cuentas municipales y la asignación de partidas. Y pide la creación de un fondo municipal para construir viviendas populares, y que la crisis la paguen los capitalistas. Además, tasas extraordinarias para costear los planes de infraestructura y vivienda para las barriadas, y salario igual al costo de vida.

* Pablo Demarco es integrante del Partido Obrero de Mercedes