No sólo de noche sino también de día. No sólo en autos sino también en motos y cuatriciclos, las picadas en las avenidas de la ciudad y en la propia calle céntrica 25 se repiten constantemente y son nuevamente denunciadas por vecinos de varios sectores de la ciudad.

De acuerdo a lo que los vecinos han venido reclamando en diferentes medios, en avenida 30, por ejemplo, hay varios grupos que se dedican a correr por las tardes en cuatriciclos de mediana cilindrada, con el peligro que ello implica. “Parece una moda estar ahí para los chicos, pero deben tener cuidado porque pueden ocurrir accidentes muy graves”, contó una vecina.

En tanto, en la propia calle 25 están espantados por las velocidades que despliegan motociclistas y automovilistas, sobre todo pasadas ciertas horas en las que no hay nadie estacionado en las aceras y poco movimiento y la calle comercial se transforma en una recta de aceleración en la que, cuentan, se llega a sobrepasar los 80 kilómetros por hora a la altura de la 28, en la aceleración de estos conductores.

Es costumbre ver además, por las tardes, las aceleraciones entre semáforos en la avenida 29 o en la 17. “Algunos tienen autos y los preparan”, apunta una vecina de la 40, aunque asegura que esa zona dejó de ser tan activa ya que en el pasado hasta había carreras con público.

Los antecedentes no son buenos en esta materia y se sabe que un auto a mucha velocidad puede ser letal en el impacto contra una persona. Sin embargo, todavía no se ha logrado controlar este problema.

En general, el problema del tránsito en Mercedes pasa por la falta de educación vial y exige de urgente corrección en la toma de conciencia para evitar una desgracia, que no ocurre por estos días por mera causalidad, ya que los autos y motos se disparan como proyectiles en la ciudad y en ciertas horas de la noche, más allá del esfuerzo que se ponga en la carga de inspectores en la ciudad, no hay control alguno.

Será uno de los temas a resolver sin dudas para los próximos meses y seguramente se hablará desde los púlpitos de las campañas de este 2007 sobre la cuestión. Sin embargo las soluciones llevarán tiempo y el reclamo de algunos vecinos, que marcan esta realidad porque están cansados de escuchar los escapes atronando las calles por las noches, exige actuar ya.