Candidato a diputado provincial por la Primera Sección Electoral de la Provincia de Buenos Aires, Javier Mariano Torres es uno de los pocos mercedinos que trascienden las listas locales. Ocupando el sexto lugar en el frente electoral que presenta UNA (Unión para una Nación Avanzada) para diputados bonaerenses, Javier es el segundo candidato radical que incluye esta lista.

Militante de la UCR desde los dieciséis años, hijo del actual candidato radical a intendente Juan Manuel Torres, este abogado de 42 años no evade el compromiso a la hora de hablar sobre política local, provincial o nacional.

“Selva asumió el gobierno y se rodeó de un grupo de gente de su entorno para ver cómo podía manejar el Municipio. En ningún momento le importó si los que había elegido eran idóneos o no para los cargos que terminaron ocupando”, opinó.

Para Torres, las consecuencias del accionar del actual intendente fueron evidentes en la interpelación que le hiciera el Concejo Deliberante, con un Selva mostrándose como víctima de su propio desorden administrativo, sin poder dar respuestas a muchos cuestionamientos, entre ellos el de porqué “en el municipio se gastan 200.000 pesos anuales solamente en teléfono”.

“El presupuesto pasó de los 16 millones que se manejaban en la época de Gioscio a superar los 35 millones en la actualidad y seguimos teniendo la misma estructura municipal que manejaba Gioscio. Y uno mira y se pregunta, ¿dónde están las obras públicas que debería haber hecho un municipio con tantos recursos? Porque tanta inflación no hubo. La única respuesta es que Selva tiene un desorden administrativo que es caldo de cultivo para la corrupción o una forma de ocultar actividades corruptas”, opinó.

Dos que son lo mismo
Para Torres, Selva y Zubeldía no son otra cosa que dos caras de la misma moneda. “Ninguno plantea reordenar la estructura administrativa; o hacer una política administrativa honesta; o propone a las mejores personas en cada ámbito para que cumplan funciones dentro del gobierno. Todo lo contrario, lo único que proponen son pavadas para lograr acceder al gobierno”.

Muy lejos del concepto que la gente tenía de quien fuera hasta no hace tantos años la principal figura del Justicialismo local, Torres afirma que Selva y Zubeldía no son considerados por el común de la ciudadanía como buenos administradores o personas honestas. “Sería bueno que el Partido Justicialista de Mercedes comenzara a reestructurarse para poder recrear lo que la gente rescataba de Gioscio, que fue un prolijo administrador y con recursos muy justos siempre pudo pagar los sueldos y tener las cuentas en orden, mientras que a éstos, el presupuesto no les alcanza nunca”.

En contraposición, explicó que la propuesta del radicalismo pasa fundamentalmente por “un cambio honesto y decente para poder transparentar lo que es la administración pública”. Para lograrlo, Torres admitió que quien deba asumir el gobierno municipal de aquí en más deberá llamar primero a “una auditoría externa para ver en qué se han gastado los recursos”.