Diversas han sido las actividades que se han desarrollado con participación de la sociedad civil dentro de la Unidad Carcelaria Nº 5. El martes por la tarde, una las aulas que se usan para dictar clases y talleres, se convirtió en una pequeña sala de cine.

Roberto Iribarne instaló su pantalla gigante para la proyección. El film: “El Ilusionista”, con Edward Norton y Paul Giamatti. En este relato, basado en un cuento de Steven Millhauser, los protagonistas son presa y cazador. Norton encarna a un mago con posibles poderes sobrenaturales y seguros problemas románticos. En un mundo donde nada es lo que parece, un mago y un inspector de policía se enfrentan en una batalla de astucia e inteligencia, justo allí donde la realidad retrocede ante la magia, y se borran los límites entre el poder y la corrupción, el amor y la devoción, la obsesión y la patología y, en última instancia, la vida y la muerte.

Durante una hora y media, el silencio se hizo dueño de la sala y la atención estuvo puesta sólo en la pantalla. Los internos disfrutaron de esta muy buena película, agradeciendo la presencia de quienes organizaron la actividad, contando con el aval de las actuales autoridades de la Unidad 5, que han manifestado en más de una oportunidad la decisión de generar este tipo de intercambio entre los internos y la sociedad civil. Como toda manifestación artística, el cine genera emociones y proporciona estímulo al espíritu, sensaciones que compartieron internos y aquellos que luego de la función traspusieron las puertas del penal. Una tarde distinta para los internos que tuvieron la oportunidad de disfrutar de un film de alta calidad, como en el cine.