Tal cual publica el sitio web Luján en Línea, el Organismo Provincial de Desarrollo Sostenible (OPDS) ratificó la clausura del horno de Curtarsa y puso condiciones para la reapertura de la planta, sindicada como una de las responsables de la contaminación en la zona y especialmente en la cuenca del río Luján.

Se indica que tras la clausura dispuesta por el municipio de la vecina ciudad de Luján, el Órgano Provincial de Desarrollo Sostenible decidió en la tarde del martes ratificar de forma parcial la clausura a Curtarsa.

Ahora la firma Curtarsa y las autoridades deberán iniciar un trabajo conjunto para garantizar el cumplimiento de la normativa.

Lo que se dice es que el OPDS dispuso una delegación de funcionarios para constatar el alcance de la medida y evaluar los daños ambientales que fueron denunciados en Jáuregui. Entonces se decidió mantener la clausura al horno de secado de barros de desechos químicos, a la vez que se exigió el cumplimiento de las normas vigentes, con un seguimiento constante por parte de los inspectores.

Afirma el medio de Luján que “los olores emanados del horno habrían sido el detonante para el proceso de clausura. Se trata de un dispositivo de secado del barro de los residuos industriales que estaría funcionando sin la autorización de la Provincia”. “Según trascendió, el sistema se habría habilitado sólo por un período de prueba de 3 meses, pero la curtiembre habría optado por su utilización constante. De esta manera se buscaría reducir el peso de los desechos y el consiguiente ahorro de dinero en la deposición final de esos barros, luego convertidos en tierra seca”, se apunta.