Nuevos atropellos contra el arbolado urbano son cometidos cotidianamente y el caso de la extracción de un plátano en la avenida 17 entre 24 y 22 así como la poda destructiva de otro ejemplar son uno más en una serie encadenada y sin propósito aparente más allá de la destrucción. La poda y tala continúa, y en el caso de la reciente extracción en la avenida 17 de un plátano se sabe que hubo denuncias a la comuna ante el hecho.

Más allá del evidente daño en materia ambiental que se genera con las extracciones, lo cierto es que al no reponer árboles se está violando una ordenanza vigente, la 2535/80, que en su artículo 5º aclara que “Si el retiro de la planta es solicitado por razones edilicias por los daños que provocan sus raíces o ramaje, se procurará solucionar el problema tratando de salvar el ejemplar”.

Pero en la ciudad de Mercedes parece que todo vale y el texto de la ley no siempre se cumple. Por caso vale recordar la poda y extracción de árboles en avenida 30, donde tras el paso de las motosierras se aseguró que los quitaban para colocar otros. Esto fue en septiembre del año pasado y al día de hoy en la sede del Colegio de Arquitectos de la Provincia, Departamental Mercedes, no se ha puesto nada en los canteros.

Otros ejemplos se pueden citar en la misma avenida 30 pero unos metros más al este, cuando por decisión judicial se taló un jacarandá, dejándolo como un “posa pava” y provocando la ira de los vecinos de la zona. Tampoco hubo reposición arbórea en ese caso. Y el hecho sucedió en noviembre de 2006, en un lugar en el que deberían protegerse estas hermosas especies que en su floración muestran intensos azules y dan una belleza singular al paseo, además de ofrecer, como toda planta, oxígeno para combatir el smog citadino.