Desde la ciudad de Mercedes hace un largo tiempo la Unión Mercedina de Inquilinos viene bregando por la defensa de los que no son propietarios y sufren las peripecias de ser inquilinos, con aumentos que rondan, tal cual denuncian, un 100 por ciento de una temporada a otra.

De esta manera, la Unión Argentina de Inquilinos, la Unión Mercedina de Inquilinos (UMI), la UNIDEVI (Unión Nacional de Viviendas Indexadas), asambleas del pueblo y transparencia inmobiliaria, en forma conjunta, denuncian que “la vivienda enfrenta una situación de quiebra generalizada”.

“Acorralados por expensas abusivas y confiscatorias, producto de la connivencia de administradores de consorcios con el sindicato de porteros (SUTERH) conducido por Victor Santamaría, bajo la protección política del Ministerio de Trabajo, sumadas a la liberación de las tarifas de servicios de luz y gas y los aumentos de tasas e impuestos, así como la aplicación de tasas variables a los préstamos hipotecarios, se ha generado un marco asfixiante para inquilinos y deudores hipotecarios cuyos ingresos no alcanzan a cubrir todos estos gastos y que culminan con su expulsión de la vivienda formal”, afirman.

“Todo esto enmarcado en un cuadro económicamente recesivo internacional agudizado por la incompetencia gubernamental que ha devenido en un aumento de la pobreza y el desempleo. Ya los alquileres sufrieron un aumento del 100 por ciento de su valor en el período 2007/2008 y mantienen su ritmo de aumento a pesar de la disminución del valor de la propiedad inmueble estimada recientemente de un 10 a un 25 por ciento”, aseguran.

“Los propietarios de inmuebles de renta sostuvieron para justificar los alquileres abusivamente aumentados que correspondían a la valorización de la propiedad inmueble pero mantienen su injustificable actitud a pesar de su actual desvalorización. Dado que el derecho al techo se encuentra incluido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos (Art.25.-1) que forma parte de nuestra Constitución Nacional (Artículo 75 inciso 22) exigimos una respuesta inmediata del Gobierno Nacional que implique control de la renta inmobiliaria, defensa de la calidad de la vivienda y garantizar la estabilidad del techo. Instamos a los sectores afectados a la participación, organización y movilización a lo largo y ancho del país reclamando a sus representantes políticos para que el problema de la vivienda sea considerado una política de Estado y forme parte la agenda pública”, apuntan en el comunicado conjunto.

“Son cada vez más las organizaciones que se suman al reclamo por una vivienda digna. En Mercedes, intentamos poner en tema en agenda instando a las distintas fuerzas políticas a plantear sus  propuestas en relación a la vivienda”, comentó la edil Claudia Lucero, integrante de la Unión Mercedina de Inquilinos.