Con el objetivo de exigir un aumento salarial antes de fin de año y en busca de que el reclamo sea contundente, los trabajadores enrolados en ATE y los médicos de Cicop iniciaron este miércoles un paro de 48 horas que coincidirá, el jueves, con una medida de fuerza de los docentes y de los judiciales. Ese día, todos los gremios marcharán hasta la Gobernación.

La Asociación Trabajadores del Estado reclama la reapertura de la negociación salarial, el blanqueo y equiparación de Urpes y sumas en negro, el pase a planta de los precarizados y el pago del 3 por ciento de antigüedad para los municipales.

Los médicos, que mañana se movilizarán a las 11 horas al Hospital Larcade, en San Miguel, exigen una recomposición salarial de 22 por ciento, el pase a planta permanente de 600 profesionales becados, creación de 800 nuevos cargos, aumento de reemplazos de guardia y sanción de una ley de normalización de la carrera profesional. Por la medida de fuerza sólo se atenderán guardias y urgencias en los 77 hospitales bonaerenses.

Por otra parte, los maestros nucleados en el Frente Gremial Docente (FEB, Suteba, UDA, Amet y los privados de Sadop) realizarán el jueves el primer paro del segundo semestre, reclamo que se repetirá el 3 de noviembre, luego que la Provincia se negara a elevar una oferta de suba salarial.

En este contexto, el ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni, le bajó el pulgar al reclamo docente y convocó para la semana próxima a una reunión paritaria “para trabajar el tema salarios 2010”. Si bien reconoció que en democracia existe el derecho a reclamar, el funcionario dijo que “la discusión salarial 2009 está cerrada”.

Desde el gobierno de Daniel Scioli sostienen que la situación financiera por la que atraviesa la Provincia le impide encarar una nueva negociación salarial.