Como era de esperar y luego de diferentes declaraciones aisladas en enero, los gremios bonaerenses comenzaron a marcar territorio y apurar al Gobierno para que convoque a paritarias cuanto antes, y ya se escucharon reclamos salariales de hasta el 40 por ciento.

Así, los judiciales de la AJB salieron a pedir un aumento de entre “el 30 y 35 por ciento”. En paralelo, los judiciales volverán a su reclamo histórico: la recuperación de la denominada porcentualidad salarial que ata sus salarios al de los jueces.

Mientras tanto, los estatales de ATE, estiman que la negociación debe darse como mínimo en una cifra del 30 por ciento. En ese sentido, el secretario general de ATE Provincia, Hugo “Chachorro” Godoy, volvió a hablar del pedido del reclamo del sector de la administración pública para la próxima reunión con la Provincia, y afirmó que el gremio reclamará una suba salarial de 30%, en consonancia con la inflación que calculan que habrá en el año, y una paritaria abierta para discutir un estatuto escalafón de los trabajadores y equiparaciones de categorías entre las diferentes áreas.

“Vamos a las paritarias exigiendo recuperar lo perdido” argumentó el Secretario General de ATE provincia. “Fue mucho lo que perdimos en 2009, cuando la inflación fue de 16% y el aumento que otorgo el gobernador fue del 9% (perdimos 7 puntos). En 2010 la inflación fue del 26% y el aumento fue del 17% (perdimos 9 puntos) La canasta básica de un trabajador hoy esta en 5300 pesos y el salario mínimo de un estatal es de 1800 pesos”, agregó.

Estos gremios de la CTA se sumaron así al reclamo de los docentes del Frente Gremial que ya salieron a plantear públicamente subas del orden del 30 por ciento.

Hasta el momento, los médicos de Cicop pidieron la suba más alta: un 40 por ciento, para que el sueldo de un profesional ingresante se “equipare con la canasta básica familiar”.

Hasta ahora fue el ministro de Economía bonaerense, Alejandro Arlía, quien salió al cruce de los reclamos sindicales. El funcionario le bajó el pulgar a las pretensiones de aumento salarial de al asegurar que los porcentajes de suba que los gremios tienen previsto solicitar formalmente en paritarias están “lejos de las posibilidades” de la Provincia.

Arlía consideró que los referentes sindicales de la provincia están manejando porcentajes “con mucha liviandad” y que esas pretensiones “no se condicen con el nivel de madurez que nosotros solemos observar en el marco de las paritarias” ni tampoco “tienen mucho que ver con el marco macroeconómico” nacional ni provincial.

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