El arzobispo de Mercedes-Luján, monseñor Agustín Radrizzani, presidió este domingo una misa en la basílica nacional con motivo de la festividad de Nuestra Señora de Luján, patrona de la Argentina. A la celebración eucarística asistió la intendenta de Luján, Graciela Rosso, y otros funcionarios municipales.

Tal cual destaca la agencia AICA, en la homilía, monseñor Radrizzani dijo que "nos hemos reunido en la casa de Dios, en la casa de María, para homenajear a nuestra madre en el día de su fiesta. Estoy convencido que ella nos atrae como un imán, nos va transformando a imagen de su hijo Jesús, y después nos envía a nuestros hermanos".

"La Virgen en este santuario está aquí desde 1630. Ella decidió quedarse aquí. Y está recibiendo a más de 10 millones de peregrinos cada año. Es frecuente escuchar en las confidencias que vienen porque la necesitan, y ven que salen distintos, cambiados, vuelven a casa renovados por la presencia de María. Quizás es una presencia hecha de silencio, de paz, de rezos, pero sobre todo de una gran confianza", recordó.

El prelado destacó también la entrega del beato Juan Pablo II a la Virgen: "Él en su juventud hizo un acto de confianza total en manos de María. Por eso, su lema episcopal y como pontífice, siguió siendo "yo soy todo tuyo, María".

"Sin visiones no se puede vivir. Sin ideales no se puede vivir. Por eso estamos aquí. Nosotros creemos, aún en medio de nuestras dificultades, en la protección de María; aún en medio de los dolores, en la presencia de María. María está, nos acompaña, nos fortalece", concluyó.

Peregrinación en familia
En tanto, numerosas personas llegaron este domingo a la ciudad en el marco de la 109ª peregrinación anual a pie en familia, que llevó por lema "Con María, nos comprometemos con la vida".

Los peregrinos habían salido el sábado de la basílica porteña de San José de Flores, en una expresión de fe organizada por la Sociedad de Peregrinos a Pie a Luján.

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