Las Navidades son la época en que los niños le dicen lo que quieren a Santa Claus y los adultos lo pagan diría el profesor universitario Ricchard Lamm, contador y abogado estadounidense. Asimismo concluye su frase mordaz diciendo que “los déficits son las épocas en que los adultos le dicen al Gobierno lo que quieren y los niños lo pagan” y no se equivoca. Lo que le sobra de ironía a Lamm, es lo que les falta a nuestros dirigentes en sabiduría para manejar el bien común de los administrados.

El acervo de nuestros políticos tanto material como intangible es una montaña de inicuos desaciertos y politiqueo bochornoso.

Por una parte el gobernador de la provincia de Buenos Aires Daniel Scioli cierra el Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible, OPDS, porque seguramente para sus asesoretes la provincia es una gran cloaca legalizada pero manejable, por lo tanto no hay que preocuparse del medio ambiente. En su lugar la subsume a una nueva "Secretaría de Espacio público y urbanismo", aún así con total desfachatez OPDS no se privó de asistir a la cumbre de cambio climático de Durban.

Parecería que las nuevas caras que acompañan al gobernador reelecto, le dan las “gracias totales” por las incongruencias, tales como el nombramiento de un integrante de Soda Stereo, para estar al tono con el vicepresidente roquero.

El análisis de dicha secretaría es que la biodiversidad pasa a segundo plano para dar prioridad al desarrollo (incremento), planificación (un proyecto fantasma) y urbanización (edificar sobre la destrucción).

Por su parte, otro reelecto por escasos votos a la intendencia de Mercedes, Carlos Selva, tampoco es amigo de las restricciones a la hora de envenenar a los mercedinos. Si no es quemando basura a cielo abierto que para sus abogados “no es contaminante”, se fumiga sobre ríos y casas sin importar niños, escuelas, ganado o huertas.

A siete meses de enterarse del niño de cinco años con leucemia linfoblástica aguda luego de ser bañado con agrotóxicos por una avioneta, que sirvió de caso testigo para el dictado de la Resolución N° 32/2011 del Defensor del Pueblo Carlos Bonicatto, parece no ser suficiente para Selva. Y así se lo hice saber rechazando su carta documento de fecha 16 de diciembre.

En ella se me acusa de tratarlo de "genocida" en un diario, algo que ningún jefe de redacción de los portales mercedinos pudieron corroborar, lo que “deja en clara evidencia un cinismo desaprensivo cuya única finalidad es la de dilatar con pobres argumentos, mala asesoría jurídica y vergonzosa “chicana” sólo para dar tiempo tanto al Honorabe Concejo Deliberante, como a la justicia, para llegar a la feria judicial, aplazando aún más un tema tan crucial para la salud del niño y toda la comunidad mercedina expuesta a la fumigación sin control”.

Lo que se reclama es la redacción criminal del artículo 4° de dicha ordenanza, que permite aplicaciones aéreas a una distancia de 300 metros de cualquier vivienda de todo el Partido de Mercedes, en clara oposición a la Ley 10.969, su Decreto 499/91, violando el Derecho de Participación Ciudadana al aprobar la ordenanza sobre tablas y sin el consenso de los ciudadanos.

Si no quiere trabajar en diciembre la intendencia “deberá llamar a sesión extraordinaria al HCD para dar una respuesta urgente a un deber que no se ha cumplido nunca, ni por el intendente ni por los concejales electos, que es “velar por la salud de los habitantes” nada menos que el soberano. Pero si parece imperioso para los ediles y el jefe del municipio, salir de vacaciones de forma acuciante, aún ante el peligro en la demora, lo que hace aún más viable una cautelar”, dice otro párrafo de la intimación.

En una reunión realizada en la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Buenos Aires, a mediados de noviembre, estuvieron presentes la Secretaría de Derechos y Garantías, donde tramita el Expediente N° 1467 por fumigación y leucemia “causa Juan Estanislao Milesi”, Carlos Américo Selva , su secretario de gobierno Sergio López, la ingeniera Agrónoma Carolina Barros Schelotto, la representante de Medio Ambiente y una abogada para tratar el caso y la corrección y/o impugnación inminente de la Ordenanza N° 6998/11.

Lo que se reclama es la redacción criminal del artículo 4° de dicha ordenanza, que permite aplicaciones aéreas a una distancia de 300 metros de cualquier vivienda de todo el Partido de Mercedes, en clara oposición a la Ley 10.969, su Decreto 499/91, violando el Derecho de Participación Ciudadana al aprobar la ordenanza sobre tablas y sin el consenso de los ciudadanos.

La denuncia del caso realizada el 4 de mayo de 2011 generó además una causa penal en la Unidad Fiscal de Delitos Ambientales UFIMA , Expediente N°965/11 a cargo del Fiscal Federal doctor Ramiro González, quienes tomaron declaraciones, fotos, videos y realizaron croquis del lugar que es fumigado.

Ante la renuente negativa y omisión desde la Municipalidad de Mercedes y según Ley 12. 068 del Proceso Administrativo ya se encuentran copias del expediente en la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires y en el Juzgado en lo Contencioso Administrativo Nº 1 Departamento Judicial Mercedes.

El lunes 19 de diciembre se intimó nuevamente al municipio para que no dilate el tema para el año 2012: “Demasiado se abusó de nuestra paciencia con total indiferencia ante el padecimiento de la familia Milesi y de toda una ciudad sujeta a las fumigaciones indiscriminadas y sin regulación local, que proteja la salud y la vida de los mercedinos, esos Sr. Intendente, que hace pocos días lo votaron”, concluye la carta documento.

No podemos festejar la Nativitas si nuestros gobernantes permiten y festejan la muerte en pequeñas dosis fumigando nuestras cabezas.

Tal vez estos políticos no festejan Nochebuena como algunas iglesias protestantes prohibían el festejo de la Navidad, llamándola "Trampas de los papistas".

Tal vez para nuestros hijos el primer desencanto en la mañana de Navidad seguirá siendo, entre otras cosas, que las pilas no estaban incluidas con el juguete que dejó Papá Noel.

Tal vez todas las navidades los condenen al Carbonilla, que es el encargado de dar carbón en vez de un regalo a los niños que se portaron mal.

La palabra “progreso” no tiene ningún sentido mientras haya niños enfermos condenados al cáncer, pudiendo evitarlo. Estamos en vísperas de Navidad, y de ustedes los gobernantes, depende que estas fiestas nos traigan alegrías o penas y nos expliquen a todos en qué nos portamos mal, para merecer un carbón, un veneno, una enfermedad o un funcionario tan deplorable.

* La doctora Graciela Gómez es abogada defensora de la familia Milesi en el reclamo por el caso de las fumigaciones en predios linderos a la parcela que tienen la zona rural del Partido de Mercedes.