Por Susana Spano

El 1 de marzo, comenzó el Encuentro Regional de Teatro Martín Caracoche Mercedes 2012, organizado por el Consejo Provincial de Teatro Independiente de la Provincia de Buenos Aires.

Los espectáculos, así como los talleres que se dictan en el Teatro Talía, son gratuitos y cuentan con una variada gama de temáticas. Muchas de las obras participan en un concurso organizado por el Consejo Provincial y, otras, se representan fuera de concurso.

En la primera jornada se presentó el Grupo Face Teatro - Pilar, con la obra “Pugliese y D’Arienzo” de Alberto Cattan, con la dirección de Jorge “Titi” Villar.

La temática de la pieza bucea sobre la problemática de la vejez, con fuertes pinceladas críticas sobre el papel de los mayores dentro de una sociedad en la que todo es vértigo y consumismo. Belladona (Hugo Alba) y Pérez (Ernesto Sigaud) son dos viejos jubilados que un día, por casualidad, se encuentran en el parque. Cada uno aparenta una situación familiar que dista de la real y, con el paso de los días, tejen una amistad que nutre la necesidad de afecto de la que ambos carecen.

La obra se inicia en un tono distendido y afable que evoluciona hacia la dura realidad que corre el velo y deja al descubierto la soledad de estos hombres, que sólo se tienen el uno al otro.

El conflicto llega a su centro cuando Belladona revela que su hija va a internarlo en un geriátrico. Las máscaras caen, Peréz también cuenta su verdad y una idea loca toma forma dentro de él: escaparse juntos, lejos, hacia el sur, donde el mar es eterno y la vida diferente. No hay objeción ni razonamiento que pueda con la voluntad soñadora de Pérez que arrastra a su amigo a imaginar cómo será tener una “vida”…

El día llega por fin. El encuentro es en el parque; el mismo que los reunió por primera vez. Algunas  peripecias, un momento de profunda emoción y un final inesperado, son el corolario de la anécdota de estos dos seres que estaban condenados a ser arrumbados como trastos inservibles y que, en cambio, deciden soñar, vibrar, tener esperanza

El texto propuesto por Alberto Cattan, de una profunda belleza, fue jugado de manera admirable por dos grandes actores. Hugo Alba compuso a Belladonna, maravilloso, tierno y travieso, al que le dio el manejo escénico exacto y la plasticidad corporal que el personaje requiere y Ernesto Sigaud dio vida a Pérez, duro y engolado, que poco a poco, descubre su lado tierno y necesitado de afecto.

Acertada, en cada detalle y en la marcación de los personajes, fue la dirección de Jorge Villar, bien jugados los efectos lumínicos y la ambientación general.

El Grupo Face Teatro – Pilar, subió a escena una obra emotiva, un verdadero canto a la libertad que, a través de un descollante trabajo actoral, movilizó a los espectadores y dejó en ellos un espacio para la reflexión.