Se presentó un proyecto de Ley en Diputados para que se distinga al paleontólogo José Bonaparte como Personalidad Destacada de la provincia de Buenos Aires. El mismo fue impulsado por el mercedino Alberto España, quien firma el proyecto junto a varios de sus pares como son los diputados José Ottavis, Juan De Jesús y Fernanda Raverta, entre otros.

Lo que se propone es declarar “Personalidad Destacada de la provincia de Buenos Aires al Paleontólogo Doctor José Fernando Bonaparte”, y “hacerle entrega de la distinción en ceremonia especial de homenaje y reconocimiento”.

La serie de aspectos que se encuentran en los fundamentos que motivan el proyecto de ley es muy extensa, marcando que se quiere “homenajear al Doctor José Bonaparte, vecino de la ciudad de Mercedes, en reconocimiento a su rica y extensa trayectoria, y a sus invalorables aportes científicos realizados en el estudio de los vertebrados fósiles en general, y sobre todo de los de nuestro suelo sudamericano en particular”. En este sentido señalan en la biografía de José Fernando Bonaparte, que es el segundo de cuatro hermanos, nació el 14 de junio de 1927 en la ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe y a la edad de 13 años su familia se radicó en la ciudad de Mercedes, provincia de Buenos Aires, donde cursó el 6º grado, en la Escuela Normal Justo José de Urquiza. “La Ciudad de Mercedes se transformó en su ciudad por adopción y es el lugar donde reside actualmente y, aunque ya jubilado como Investigador Científico del CONICET, continúa con su labor como Asesor Científico del Museo Municipal “Carlos Ameghino”, que él mismo fundara, y publicando investigaciones en revistas especializadas de todo el mundo. Desde muy temprana edad sintió la atracción por los fósiles, a los que fue descubriendo casi diariamente en el camino desde su casa hasta la escuela, y detenerse en la vivienda de Don Andrés Canessa, paleontólogo de origen italiano radicado en Mercedes que trabajó junto a Carlos y Florentino Ameghino y al perito Francisco Moreno. Hubo un libro, “Filogenia”, escrito precisamente por Florentino Ameghino, y que recibiera de las manos de su amigo de hoy y de entonces, Albor Ungaro, el que despertó en José esa férrea inclinación por el estudio de los fósiles, convirtiéndolo en un precoz portador de una notable vocación orientada a la paleontología”, se señala en los fundamentos del proyecto de ley.

A continuación, parte del resto de la fundamentación, que marca la brillante labor de Bonaparte, al que, a sus 85 años de edad, y en vida, se quiere destacar:

A partir del año 1944 junto a un grupo de jóvenes, teniendo como guía la obra que Florentino Ameghino había realizado en Mercedes setenta años antes, sintió la atracción por explorar la cuenca hidrográfica del noreste de la provincia de Buenos Aires, especialmente las márgenes de los ríos Luján, Areco, Arrecifes y sus respectivos arroyos afluentes, obteniendo como resultado de sus reiteradas incursiones un creciente interés producto de los incipientes yacimientos que descubría.
José Bonaparte fue uno de los primeros en destacar la importancia de la cuenca del Río Luján como fuente de yacimientos paleontológicos, y al respecto escribió: “La extraordinaria riqueza paleontológica de esta región comenzó a manifestarse cuando en 1787 el Padre Torres descubrió el famoso esqueleto del gran mamífero Cuaternario Megatherium en las orillas del Río Luján, enviado como regalo muy especial al Rey de España durante el Virreinato del Marqués de Loreto. Ese enorme mamífero desconocido en el mundo científico de esa época fue estudiado por el sabio francés G. Cuvier en 1796. Dicho ejemplar se exhibe públicamente en el Museo de Ciencias Naturales de Madrid”.
La región cobró fama internacional en los medios científicos, especialmente cuando el joven Florentino Ameghino descubrió en 1873 un esqueleto humano en el Arroyo Frías, afluente del Río Luján, asociado a restos de la mega fauna del Cuaternario. Durante su estadía en París en 1878, Ameghino comunicó a sabios europeos por primera vez, la coexistencia del hombre con la fauna extinguida, evidencia desconocida en Europa a fines del siglo XIX.
Ya en el año 1947 llega a reunir una importantísima cantidad de fósiles, y junto a su grupo de amigos, entre los que se encontraban, Italo y Octimio Landi, Rodolfo Capaccio, Albor Ungaro, Juan Pisano y Aníbal Cueto, grupo al que posteriormente se sumara su hermano Pedro, se dieron la tarea de fundar el Museo Popular “Carlos Ameghino”, así denominado en homenaje al naturalista, explorador, paleontólogo y hermano menor de Florentino, ambos nacidos en la vecina ciudad de Luján.
El museo comenzó a funcionar en la Casa del Pueblo, del Partido Socialista, y posteriormente, como las colecciones iban aumentando, y se necesitaba un mayor espacio, se trasladaron a la Biblioteca Sarmiento. Dieciocho años después de su fundación, tras recorrer un difícil camino con muchísimas carencias, pero creciendo científicamente, el 28 de septiembre de 1965, durante la gestión del Intendente Juan José Marín, se logró mediante la promulgación de la Ordenanza Nº 1910, su traspaso a la órbita municipal asignándosele el actual edificio en calle 26 entre 21 y 23 de la ciudad de Mercedes.
En él aún se conservan las primeras vitrinas de madera construidas por el propio José Bonaparte, habilidad que incorporara en su adolescencia trabajando en la carpintería de los hermanos Landi.
Desde aquellos años y hasta el presente, la prolífica obra de José Bonaparte, constituye una muestra más que destacable de la capacidad de producción científica que caracteriza a los hombres de ciencia argentinos, que día a día nuestra sociedad reconoce y valora en forma creciente.
Numerosos investigadores y científicos de las más diversas disciplinas, en la gran mayoría de los casos, egresados de nuestras universidades, han sido premiados por organismos nacionales, internacionales, universidades, e incluso entes privados, confirmando que sus obras y descubrimientos, han significado verdaderos avances para la sociedad, trascendiendo las fronteras de nuestro territorio y de su tiempo.
Pero hay excepciones que merecen ser destacadas. Los argentinos tenemos el privilegio de contar entre nuestros hombres de ciencia a José Bonaparte, explorador, naturalista, investigador, docente y paleontólogo, egresado del 6º grado de la Escuela Normal de Mercedes, un auténtico autodidacta, trabajador incansable y apasionado por los fósiles, que ha recibido, recibe y recibirá el reconocimiento de la comunidad científica nacional e internacional por su obra y sus descubrimientos, pero sobre todo por los relevantes servicios prestados a la sociedad, al potenciar con su participación, las actividades científicas y académicas en disciplinas vinculadas a la paleontología de vertebrados.
Cuando llegó a la Universidad, lo hizo en calidad de Investigador. En el año 1959 se incorporó al Instituto Miguel Lillo de la Universidad Nacional de Tucumán y entre los años 1975 y 1979 fue Profesor Titular de Paleozoología, y entre los años 1960 y 1978 Director de la Sección Paleovertebrados, Sección que alcanzó una jerarquía notable, no solo por los excepcionales materiales que se reunieron sino también por los numerosos trabajos que se publicaron. En esta casa de altos estudios fue Docente e Investigador durante un lapso de 20 años.
Espectaculares fueron los descubrimientos de fósiles que logró en distintas geografías argentinas en lugares como Ischigualasto, San Rafael, Talampaya, y en varias zonas de ese paraíso de los paleontólogos que es la Patagonia Argentina.
En su haber se cuentan como principales descubrimientos las localidades fosilíferas:
• De Los Colorados, La Rioja, 1961 (Triásico).
• Del Río Mendoza, Potrerillos, 1962 (Triásico).
• De Lagarcito, San Juan (Cretácico).
• De Cañadón Asfalto, valle Medio del Río Chubut (Jurásico).
• De La Amarga, Neuquén, 1991 (Cretácico).
• De Los Alamitos, Río Negro, 1990 (Cretácico).
• Del Cerro Cóndor, Chubut, 1976 (Jurásico Medio).
En los hallazgos realizados por José Bonaparte, se destacan los primeros nidos de dinosaurios con pichones y huevos en la provincia de Santa Cruz, en el año 1976, pertenecientes al Triásico Superior; los primeros mamíferos mesozoicos de América del Sur, en la Patagonia Argentina en 1983; el esqueleto completo de Amargasaurus, correspondiente al Cretácico inferior, en Neuquén, en el año 1984; el esqueleto completo de Carnotaurus, en el año 1985 en la provincia de Chubut, perteneciente al Cretácico superior; esqueletos completos del mamífero Vincelestes, del Cretácico inferior, en Neuquén, en el año 1986; y diversos cráneos y otros restos de protomamíferos del Triásico Superior, en Rio Grande do Sul, Brasil, entre los años 1999 a 2005.
Hay otros descubrimientos importantes que merecen ser resaltados como el Argentinosaurus, el mayor dinosaurio patagónico, aves cursoriales cretácicas como Patagopterix, del cretácico de Neuquén, etc.
Además descubrió una fauna novedosa de Pterosaurios (reptiles voladores), numerosos yacimientos de edad Triásico (200 millones de años aproximadamente) en las provincias de Mendoza, San Juan y La Rioja, con abundantes e importantes restos de cinodontes (reptiles-mamiferoides vinculados al origen de los mamíferos), laberintodontes (grandes anfibios) y arcosaurios (entre los que se incluyen formas basales y dinosaurios primitivos),  entre otros.
Fuera de la Argentina, desarrolló importantes investigaciones en el Triásico del Estado de Rio Grande do Sul, Brasil, que resultaron en el hallazgo de diversos cinodontes avanzados, dinosaurios primitivos, los más antiguos esfenodontes y lagartos de América del Sur, entre otros. Asimismo, describió restos de dinosaurios del Jurásico de Africa.
En el año 1975 obtuvo el título de Doctor honoris causa sobre Geología Histórica, Paleontología y Anatomía Comparada otorgado por la Universidad Nacional de Tucumán, distinción que fue el resultado de una compulsa internacional en la que la Universidad consultó la opinión de especialistas de una docena de países, entre ellos, Gran Bretaña, Japón y los Estados Unidos.
En el año 1978 tomó a su cargo la dirección de la Sección de Paleontología de Vertebrados del Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia.
En 1983, después de cavar durante un mes en una estancia de la región Bajada Moreno, provincia de Chubut, desenterró con su equipo un ejemplar excepcional, el primer dinosaurio con cuernos que se conoce, bautizado Carnotaurus Sastrei, así nombrado en homenaje a la familia Sastre, dueña de la estancia y del cual se han conservado impresiones de la piel.
En el año 1989, a unos 8 kilómetros de Plaza Huincul, en la provincia de Neuquén, descubrió lo que se supone es uno de los dinosaurios mas grandes documentados hasta el presente, posiblemente de 50 toneladas de peso. Las vértebras dorsales miden un metro con 65 centímetros de alto, y son más grandes que las del Brachiosaurus del Museo de Berlín, que es el mayor ejemplar en exhibición del mundo.
El 18 de octubre de 2008, el Dr. José Bonaparte recibió, en la ciudad de Cleveland, Estados Unidos, la distinción más importante en materia de Paleontología de Vertebrados, el premio Romer-Simpson, que anualmente otorga la Society of Vertebrate Paleontology, reconocimiento que evoca a dos de los más grandes paleontólogos del Siglo XX, Alfred Sherwood Romer y George Gaylord Simpson.
El Dr. José Bonaparte fue el primer paleontólogo argentino en recibir esta distinción, reconocimiento que comparte con destacadas figuras de su ámbito científico como lo son Edwin H. Colbert, Zofia Kielan-Jaworowska, Percy Butler, Malcom McKenna, y Williams A. Clemens, entre otros.
Es miembro honorario de numerosas instituciones científicas nacionales como la Asociación Paleontológica Argentina, la Asociación Geológica Argentina, y extranjeras como la Society of Vertebrate Paleontology (Estados Unidos), la Dinosaur Society (Estados Unidos), la Sociedad Brasileira de Paleontología y la Society of Avian Paleontology (Francia), ámbitos que lo reconocen como hombre de vida austera y científico cauteloso, metódico y perseverante, que prefiere las opiniones documentadas a las teorías voluntaristas.
En su extensa trayectoria efectuó la Dirección de Tesis Doctoral de numerosos y hoy reconocidos paleontólogos argentinos en diversas universidades nacionales y en el Brasil. Ha sido un auténtico formador de las últimas generaciones de paleontólogos, distinguidos investigadores y técnicos argentinos de relevancia nacional e internacional como Fernando Novas, Rodolfo Coria, Luis Chiappe, Guillermo Rougier, Leonardo Salgado y Jorge Calvo, entre otros, que a su vez han creado sus propios equipos de trabajo en distintos puntos de la Argentina y del exterior.
Autor de varios libros, El mesozoico de América del Sur y sus tetrápodos (1978), Dinosaurios de América del Sur (1996), El triásico de San Juan y La Rioja, Argentina y sus dinosaurios (1997), Los Dinosaurios de la Patagonia Argentina (1998), Dinosaurios y pterosaurios de América del Sur (2009), Protomamíferos y mamíferos mesozoicos de América del Sur (2010), entre otros.
Paralelamente, en los últimos treinta años ha publicado más de 150 estudios y obras sobre vertebrados triásicos, jurásicos y cretácicos de Argentina y Brasil, publicados en revistas especializadas de  Argentina, Brasil, Estados Unidos, Inglaterra, Alemania, India, Africa y Francia, que son testimonio del valor de sus hallazgos, que es enorme, en relación con los obtenidos en otros continentes.
En sus exploraciones metódicas y continuas, que realizó desde el año 1959, en afloramientos continentales triásicos, jurásicos y cretácicos, logró reunir colecciones únicas que han dotado al Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia y al Instituto Miguel Lillo de Tucumán, de un patrimonio paleontológico de incalculable valor.
También contribuyó a aumentar las colecciones existentes en otras instituciones como el Museo de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de La Rioja, el Museo de Geología y Paleontología de la Universidad nacional del Comahue, el Museo Carmen Funes de Plaza Huincul y el Museo Prof. Juan Olsacher de Zapala.
Numerosos han sido los cargos ejercidos, así como los reconocimientos, becas, subsidios y premios obtenidos por el Dr. José Bonaparte, tanto en nuestro País como en el extranjero.
Doctor Honoris Causa, título académico otorgado por la Universidad Nacional de Tucumán, ante un jurado internacional, por sus estudios sobre Paleontología de Vertebrados de América del Sur.
Doctor Honoris Causa, título académico otorgado por la Universidad Nacional del Comahue, en el año 2011.
Doctor Honoris Causa, en atención a sus méritos científicos y académicos, título académico otorgado por el Consejo Superior Universitario de la Universidad Maimónides, en Marzo de 2012.
Investigador Superior del Conicet, promovido a esa categoría en el año 1998, después de desempeñarse desde el año 1963 como Investigador Científico.
Jefe de Paleontología de Vertebrados en el Instituto-Fundación Miguel Lillo, de la Universidad Nacional de Tucumán, desde el año 1962 hasta 1979.
Profesor Titular de Paleozoología II, en la Facultad de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de Tucumán, desde el año 1975 hasta el año 1979.
Especializado en la Universidad de Harvard EEUU, sobre evolución de los reptiles, mamíferos sudamericanos y Biogeografía de América del Sur, estudió y trabajó en el Museo de Zoología Comparada junto a su colega Alfred Romer.
Director del Departamento Paleontología de Vertebrados, del Museo de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia, de la ciudad de Buenos Aires.
Profesor Visitante CNPq, en la Fundación Zoobotánica de Porto Alegre, Brasil, desde el año 1998 hasta el año 2000.
Científico Visitante en la Universidad Federal de Río Grande Do Sul, Brasil. CNPq y CAPES, desde el año 2002 hasta el año 2004.
Premio Dr. Angel Cabrera, otorgado por la Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires, año 1994.
Galardón Arnold Guyot Memorial, otorgado por la National Geographic, año 1984.
Premio de la Universidad de Harvard (Associate in Vertebrate Paleontology), 1968.
Premio de la Academia Nacional de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la República Argentina, año 1994.
Subsidio del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas, para estudios de Vertebrados Triásicos de Argentina y Brasil, desde el año 1962 al año 1968, y durante los años 1970, 1972, 1979,1982 y 1985.
Subsidio de la National Geographic Society para el estudio de faunas continentales de Vertebrados del Mesozoico de América del Sur, en los períodos 1976 a 1981, 1983 a 1990 y durante los años 1999, 2001 y 2005.
Beca de la John S. Memorial Foundation, en 1968 y en 1973, por un año cada una, para trabajar en el British Museum y en la Universidad de Harvard.
Beca del Consejo Británico, en Londres, durante tres meses en el British Museum en el año 1967 y posteriormente durante un mes en el año 1977.
Beca del Conicet y de la Deutsche Akademie Austauschdienst, para estudiar Vertebrados Jurásicos de Alemania, en el Museo de Stuttgart, en el año 1983.
Beca del Field Museum of Natural History, de Chicago, EEUU, en el Programa de Científicos Visitantes, para estudiar la evolución paleobiogeográfica de Gondwana en el año 1984.
Beca del Ministerio de Educación de España, en Madrid, en el año 1992. Beca para un año sabático en la Unidad de Paleontología de Vertebrados, del Departamento de Biología, de la Universidad Autónoma de Madrid.
Beca de la Fundación Alexander von Humboldt, de la Universidad Humboldt, en la ciudad de Bonn, Alemania, en los años 1993 – 1994. “Científico Premiado” para estudiar Dinosaurios de Africa en el Museo de Ciencias Naturales de Berlín.
Distinciones recibidas de la Asociación Geológica Argentina, de la Asociación Paleontológica Argentina, de la Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires y de la Society of Vertebrate Paleonthology de Cleveland, EEUU.
Entre las actividades colaterales desempeñadas, se destacan:
La dirección del montaje de 6 esqueletos de reptiles triásicos de San Juan y La Rioja, para el Museo Paleontológico de la Universidad Nacional de Tucumán.
La dirección para la reconstrucción y montaje de la Sala de Dinosaurios del Museo Argentino de Ciencias Naturales de Buenos Aires.
La organización de las exposiciones sobre Dinosaurios de Argentina realizadas en Japón en 1996 y 1999; en Lisboa en 1995 y en Lieden, Holanda en 2002-2003.
Consejero de la Comisión de Ciencias de la Tierra del Conicet, 1990/92.
Consejero de la Junta de Calificación, Conicet, 1990.
Jurado de numerosas tesis doctorales en las Universidades Nacionales de La Plata y Buenos Aires, y en la Universidad Federal de Rio Grande do Sul, Brasil.
Concurrente a numerosos congresos internacionales en calidad de expositor con presentación de diversos trabajos.
Hay numerosas especies descubiertas dedicadas a José Bonaparte en reconocimiento a su labor. Ultimamente, científicos de la fundación de Historia Natural Félix de Azara, el Museo Argentino de Ciencias Naturales, el Instituto Miguel Lillo de Tucumán y la Universidad de Upsala de Suecia, han encontrado y estudiado los fósiles de una nueva especie de dinosaurio claramente asociado con su camada de huevos. Este descubrimiento es poco común, de hecho es la primera vez en el mundo que se descubre esa asociación en el grupo de dinosaurios carnívoros llamados Alvarezsaurios.
El Alvarezsaurios, denominado así en honor al historiador neuquino Augusto Alvarez, fue hallado precisamente por el Dr. José Bonaparte, y hoy, un grupo de investigadores, entre los que se encuentra el paleontólogo argentino Fernando Novas, decidieron homenajearlo imponiéndole el nombre de “Bonapartenykus Ultimus” al nuevo descubrimiento.
El caudal de información que Bonaparte estudió en sus fructíferos años le permitió formular la hipótesis que cada una de las faunas de Gondwana y Laurasia poseían componentes propios, característicos, afectados por la distinta distribución geográfica. Esta hipótesis tuvo gran impacto científico ya que explicaba las marcadas diferencias faunísticas entre ambos supercontinentes durante el Mesozoico.
Sus numerosas investigaciones sobre reptiles triásicos, el origen de los mamíferos y el descubrimiento de casi treinta especies válidas de dinosaurios le han ganado el apodo de MAESTRO DEL MESOZOICO.
Según un análisis del Dr. Mike Benton, de la Universidad de Bristol, publicado en el año 2011 en el Journal of Vertebrate Paleontology, José Bonaparte es el paleontólogo vivo con más especies de dinosaurio nombradas que siguen siendo válidas, de todo el mundo.
Hoy se sabe que sólo se conoce el 1 por ciento de las especies existentes y la ciencia intenta desentrañar cómo fue que estos gigantes y otros animales ya extintos, llegaron a dominar la Tierra durante 165 millones de años, y cómo dejaron de hacerlo.
Florentino Ameghino, -en el estudio de los mamíferos fósiles terciarios y cuaternarios- y José Bonaparte, -en el estudio de los tetrápodos mesozoicos-, son las dos figuras más relevantes y de trascendencia mundial, que a lo largo de su historia, y hasta el presente, tuvo la paleontología de vertebrados en Sudamérica, ocupando nuestro país, en particular, una posición de vanguardia en el hemisferio, tanto por la cantidad y calidad de yacimientos excavados como por la importancia de los descubrimientos fósiles descubiertos.
Por todo esto y mucho más, promover e incentivar el estudio de la paleontología entre los jóvenes bonaerenses, tomando como ejemplo la trayectoria y los aportes efectuados por numerosos científicos argentinos, pero en este caso particular por el Dr. José Bonaparte, resulta del mayor interés del pueblo y del gobierno de la provincia de Buenos Aires.
Se trata de una persona que más que excelente científico, fue y es un trabajador incansable, virtud que demuestra hasta estos días, al continuar investigando y publicando notas en los medios especializados del país y del extranjero; concurriendo a trabajar al museo que él fundara, el Museo Carlos Ameghino de Mercedes, actitudes ejemplares que evidencian compromiso y una enorme capacidad para sobrellevar obstáculos.
Se propone el presente reconocimiento al Dr. José Bonaparte como Personalidad Destacada de la provincia de Buenos Aires, porque a sus 85 años, aún puede enseñarnos mucho a los humanos, que apenas llevamos 4 millones de años en este planeta. 
Por todo lo anterior, solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto.