En la pasada sesión del 10 de julio del Concejo Deliberante, el bloque de concejales de Unión Pro presentó un proyecto (Expediente Nº 327 del concejal Juan Carlos Benítez) para modificar la forma de poda de los árboles que se encuentren en las veredas frente a las escuelas, tanto de gestión pública como privada. La altura de los árboles no deberá superar "la altura de la cornisa que los establecimientos educativos tienen a su frente". La misma fue aprobada sobre tablas y por unanimidad dando origen a la Resolución Nº 178/12 del HCD.

La iniciativa del proyecto perteneció a la consejera escolar por Unión Pro, María Mónica Brown, quien en el curso de los dos últimos años ha venido observando cómo sistemáticamente la gran altura de las ramas de los árboles, originan desde el comienzo del otoño caída de hojas, semillas y frutos en los techos de las escuelas con la consiguiente obstrucción de canaletas, desagües y caños. “Con las lluvias el techo se inunda, poco a poco el agua va filtrando, y nos damos cuenta cuando el directivo nos llama alarmado porque un salón se le llueve y tiene la instalación eléctrica empapada- expresa la consejera- con toda la peligrosidad que esto significa”.

Desde el Consejo Escolar se envían asiduamente prestadores para destapar canaletas y arreglar techos, “y ello origina un gasto importante que podría derivarse a otra problemática de infraestructura si los árboles no pasaran de la altura de la cornisa o techo de la escuela”, sostiene Mónica Brown, “si bien volarían hojas de los árboles altos de las casas vecinas al techo de una escuela, un poda diferente nos solucionaría en gran medida este problema recurrente cada año”.

Como en estos días se está realizando poda en la ciudad, la consejera tiene la esperanza que en este mismo año ya se comience a implementar esta nueva poda para poder ver su beneficio a comienzos del año entrante.

En este sentido, Brown explica que hay establecimientos muy castigados por este problema como son por ejemplo la Escuela Normal, el Colegio Nacional, las Escuelas Nº 1 y Nº 2, la Escuela de Arte, sólo por nombrar algunos de gestión estatal, y supone que a las escuelas de gestión privada deberá ocurrirles algo similar, por ello aplaude la buena predisposición de los concejales de su partido en particular por escuchar su inquietud y la de todos los otros concejales en general por haberle dado importancia a este “granito de arena que permite mejorar la calidad de los edificios educativos de los alumnos mercedinos de todas las edades”.