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21/12/12
El sentido de la Navidad es que “Dios entró en nuestras vidas”, dijo Monseñor Radrizzani Recordó que el Hijo de Dios decidió venir “con apariencia de extrema pobreza” y “como un niño pobre, pequeño y débil”. E instó a la feligresía a “vivir como Jesús vivió, amar como Jesús amó y servir como Jesús sirvió”.
El arzobispo de Mercedes-Luján, monseñor Agustín Radrizzani, expresó en un mensaje dirigido a la feligresía que el sentido de la Navidad está dado por la entrada de Dios “en la historia de la humanidad, en nuestra historia y en nuestras vidas”. El prelado compartió a través de la página web del arzobispado un mensaje con los fieles de la arquidiócesis, que comprende los partidos de Mercedes, Luján, Marcos Paz, General Rodríguez, San Andrés de Giles, Carmen de Areco, Chacabuco, Chivilcoy, Alberti, Navarro, Lobos, Junín y Vedia. “Está ya cerca la Navidad y ¿Qué es este misterio que atrae a todos, creyentes y ateos, desde hace veinte siglos?”, expresó el prelado como inicio de su mensaje. “Tanto amó Dios al mundo que nos envió a su Hijo para que todo aquel que crea tenga una vida sin fin y no muera para siempre –explicó el arzobispo–. Este es el misterio de la Navidad: Dios entró a la historia de la humanidad, Dios entró en nuestra historia, Dios entró en nuestras vidas”. Monseñor Radrizzani recordó que el Hijo de Dios decidió venir “con apariencia de extrema pobreza” y “como un niño pobre, pequeño y débil”. “Después de este nacimiento, el principal acontecimiento de la historia, el mundo debería haber encontrado el rumbo para la fraternidad, la alegría y la paz, y sin embargo constatamos cada día que hay tristeza y violencia”, comentó monseñor Radrizzani, quien alentó a “entrar en la vida de Jesús así como Jesús entró en nuestras vidas”. “Aquí radica el secreto de la felicidad”, aseguró el arzobispo. El prelado observó que entrar en la vida de Jesús “significa apropiarse de su manera de ser y obrar”. “No se comienza a ser cristianos por una idea sino por el contacto con una Persona”, explicó en su mensaje, e instó a la feligresía a “vivir como Jesús vivió, amar como Jesús amó y servir como Jesús sirvió”. “Cuando mi vida está centrada en Dios y me dejo llevar por Él -explicó- el arzobispo- comienzo a vivir con una alegría y una paz con la que se puede irradiar la fuerza de Jesús y del Evangelio”. Monseñor Radrizzani cerró su mensaje explicando que la atracción a Jesús “permite entrar en su Persona”, y entonces, se hace real la fiesta de la Navidad y su sentido religioso y real. “Les deseo de corazón felices fiestas”, concluyó.
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Mercedes - Bs As - Argentina |
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