Nuevamente ha cobrado actualidad un tema que desde hace ya larga data ha sido puesto en la mira por su estado de total abandono.

Se trata del Puente del Cañón, denominación popular por la proximidad del mismo al cañón que marca el vértice Nordeste del égido del partido de Mercedes, determinado por la mensura del agrimensor don Raimundo Prat y Puig, allá por el año 1830.

El referido puente, construido en el año 1895, allanó serios problemas viales de comunicación, utilizándose  técnicas constructivas mixtas con el uso del hierro, la madera y mampostería, verdadero alarde técnico para la época.

En diferentes publicaciones se ha puntualizado la importancia histórica del puente, como así también el deplorable estado actual que lo convierte en un peligro para su tránsito, lo que convierte en imprescindible su puesta en valor y la restauración que no desvirtúe su centenaria presencia, testigo de la evolución en el desarrollo rural.

Es de esperar que dicho testimonio patrimonial sea incluido en el inventario que acompañe la tan esperada reglamentación de la Ordenanza de Patrimonio sancionada por unanimidad por el Honorable Concejo Deliberante hace ya mucho tiempo.