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Marcelo Melo, el responsable de la Oficina de Derechos Humanos de Mercedes, tuvo mucho trabajo por estos días en la presunción de que tras su fallecimiento, el cuerpo del dictador Jorge Rafael Videla sería enterrado en el cementerio de la ciudad, donde hay dos bóvedas de la familia y en una de ellas está su padre, quien fuera jefe del Regimiento de Infantería 6. La labor del funcionario mercedino fue elogiada por muchos, en compañía de la decisión de dar a conocer la realidad de las víctimas mercedinas del genocidio cometido en la década del 70 en la dictadura que el mercedino Videla encabezó. Melo fue la cabeza de un repudio a la figura de Videla que se apoyó desde la comuna. Y el cuerpo de quien estaba preso por crímenes de lesa humanidad finalmente se supone que no llegaría a la ciudad, que marcó su rechazo en estos días.

Con el repudio a Jorge Rafael Videla, en cuestión de reivindicación de derechos humanos la ciudad pasó al frente de las noticias en el plano nacional e internacional, y el municipio no se quedó atrás y tomó varias acciones, entre ellas el haber llevado la muestra itinerante sobre las víctimas del terrorismo de Estado a las puertas mismas del cementerio, y también en dar su apoyo a la movida de repudio a la figura de Videla motorizada por fuerzas políticas y sociales. “Las notas de todo lo que sucedió en Mercedes salieron publicadas en todo el mundo, incluso en lugares remotos como Malasia o Sri Lanka, y también en el New York Times,  comentando cómo se había posicionado la Municipalidad de Mercedes tomando el asunto y con la determinación de pararse ante esta situación. Incluso el jueves por la noche fuimos invitados a un programa de televisión en el que estaba Tati Almeyda, de madres de Plaza de Mayo, que estaba muy contenta con la actitud tomada desde la ciudad. Nosotros no prohibimos, dimos la posibilidad de que lo puedan llegar a traer a Videla, pero no sin hacernos escuchar con nuestra voz de bronca ante la posibilidad. Finalmente sabemos que no lo trajeron a Mercedes, lo que nos deja más que conformes”, dijo Marcelo Melo.

Según indican algunas versiones, tras la autopsia, el cuerpo de Videla habría sido enterrado en Pilar. Otras versiones destacan que ex dictador podría ser enterrado en un cementerio de El Trapiche o de la ciudad de Villa Mercedes, a 90 kilómetros de San Luis. “Sabemos que en Mercedes no está. Al menos no en el cementerio municipal, donde no se hizo tramite alguno. Muchos nos preguntan adonde lo llevaron, pero no podemos saber lo que pasa en otras ciudades. Nos siguen llamando para preguntarnos desde los medios, pero no sabemos nada. Aquí nos posicionamos ante la posibilidad de que llegue a Mercedes, ya que el abogado de la familia de Videla había dicho que podían traerlo a la ciudad”, indicó Melo.

Lo cierto es que de esta posibilidad de que Videla fuera sepultado en Mercedes se dio un nuevo impulso a la difusión de la historia de los desaparecidos y asesinados de la ciudad, y por ejemplo en la edición del domingo de Página/12 se publica un racconto muy interesante sobre las víctimas mercedinas y cómo el terrorismo de Estado actuó en la ciudad, en un artículo llamado simplemente “Mercedinos”.

Ahora se espera que comiencen a colocarse los nombres de las víctimas locales a varias calles de la ciudad, algo que está normado por ordenanza y está en manos de la Comisión de Familiares, cuestión que es apoyada por la Oficina de Derechos Humanos de la comuna.

"La materia descansa aquí, el espíritu se eleva", dice la bóveda de Videla padre.

 

 

 

 

 

 

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