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Integrantes del Partido Obrero local llevaron adelante una volanteada en las escuelas de la ciudad en la previa de este 21 de septiembre, día de la primavera, para concientizar a los estudiantes de la necesidad de unos festejos en paz.

“Todos sabemos que el 21 de setiembre es, en Mercedes, más tradicional que el salame quintero. No solamente es el inicio de la primavera o el día del estudiante, sino también una fecha cargada de historia”, indicaron.

“Hubo épocas en que todas las promociones se reunían en el Parque Municipal, sólo las promociones. Mucho tiempo hasta este presente en el que año a año se ha ido impuesto una cultura muy particular. Esta consiste en competir, algunos establecimientos entre sí. Quién alquila la quinta más grande, quién tiene los fuegos artificiales más espectaculares, o quién puede traer la banda más cara. Podríamos seguir nombrando: desde la bandera o la ropa, pero todo en clave de competencia con el de la escuela que está a diez cuadras. Obvio que esa cultura se ha ido instalando, pero es seguro que no todos la comparten, creemos que la gran mayoría sabe que la fiesta es de todos. Aún de las escuelas que no pueden alquilar una quinta. Pero como toda cultura que se instala, también produce que algunos crean que la competencia es “a todo o nada”. Por esto el que cursa en la escuela que queda a diez cuadras se transforma en un posible enemigo, como si todos no fueran secundarios. El año próximo muchos estarán en la misma universidad, pasándose apuntes o jugando en Quilmes, Mercedes o Estudiantes o en muchos casos en la búsqueda de un primer empleo difícil de encontrar. Por supuesto que existen bandas o tribus que integran estudiantes a veces de más de una escuela, pero ningún grupo puede apropiarse de una fiesta de la mayoría. Esa cultura ha producido hechos lamentables algunos trágicos como los asesinatos de Duarte y Villalba”, agregaron.

Desde el Partido Obrero y el Frente de Izquierda llamamos a romper esa cultura de competir con el compañero de una escuela que no es la tuya. Y por qué no convocar a los que no tienen acceso a lugares privados de alquileres altísimos. Romper esa cultura es la tarea de todo el estudiantado, es entender que ahora la fiesta es de todos y que lo que separa a unos de otros es falso. Después vendrá la lucha por lograr mejorar la educación, como hacen los secundarios de capital que iniciaron la toma de sus escuelas para repudiar la reforma de Macri. O en el conurbano donde las escuelas se caen a pedazos, como acá, pero el centro de estudiantes lucha y reclama a los concejos escolares de Scioli por el aumento del presupuesto educativo. Quizá muchos de los que este sábado festejarán el 21 el año próximo estarán luchando junto al movimiento estudiantil secundario. El futuro es nuestro, vivamos la fiesta a pleno y en paz”, completaron.

 

 

 

 

 

 

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