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06/06/14
Ya pasó un año del abrazo al hospital Blas Dubarry por la falta de pediatras. Aquella mañana se cerraba la sala de pediatría porque sólo había 2 pediatras para todo el hospital, para toda la población de Mercedes y aledaños. Y en 48 horas, entre bambalinas, se reabrió la sala, con promesas de pediatras que vendrían muy rápidamente, desde distintos lugares de la Provincia a dar una mano ante esta situación crítica. Se criticó a los profesionales, que veníamos denunciando esta y más situaciones de irregularidades en dicho hospital. En los días posteriores llegó la convocatoria por parte del Ministerio de Salud a la reunión tripartita, en la ciudad de La Plata. Allí concurrimos junto con autoridades de CICOP y también se sumó ATE. Hubo promesas de planificación y de personal que llegaría al hospital. Promesas de que funcionaría el comité mixto de salud, seguridad y empleo. Que se escucharía a los trabajadores de la salud. Pasaron los meses y todo volvió al mismo lugar.
Hoy el servicio materno infantil cuenta con sólo 3 pediatras; 3 pediatras para la internación, para la recepción del recién nacido, para los traslados, y para resolver patología crítica cuando son llamados de urgencia por la guardia. Se prenden velas para que ninguno se enferme, ya que de ser así nuevamente caminaríamos por la cornisa. Lo del comité mixto, sólo un esbozo de lo que se prometió que funcionaría en beneficio de los trabajadores. Una mezcla de falta de planificación estratégica, falta de gestión en todas las estructuras ministeriales de la mano de salarios bajos, violencia hacia los profesionales y un presupuesto en salud a la baja, donde los planteles hospitalarios se van reduciendo más, hacen de todo esto un cóctel explosivo. Hoy vemos que por más que se arreglen estructuras edilicias o se traiga aparatología nueva, si el personal hospitalario no está, nada funciona. Esta crisis viene siendo denunciada, desde hace más de 5 años por esta asociación, en donde cada día empeora más. Como siempre decimos: los ladrillos y la aparatología no atienden. Es por eso que instamos al Ministerio de Salud (a través de directores y ministros) a que en forma urgente se solucione esta crisis, y no con parches y fines electorales sino con un sistema de salud provincial en serio, como corresponde, con más financiamiento, con más personal estable (y no precario) para pediatría y otras áreas. Sino, como dijimos hace un año, de seguir así nuestro viejo y querido hospital Dubarry seguirá naufragando lenta y progresivamente en la desesperanza de su triste realidad”.
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Mercedes - Bs As - Argentina