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29/08/14
A veces necesitamos que la basura nos tape para darnos cuenta. No es una metáfora en este caso, es una realidad. La basura ya no es un problema de otros, no es una sensación, tampoco es algo que apareció de la noche a la mañana en los diarios. Todos los días generamos basura. Mucha. Todos nosotros. Tenemos opciones, como casi siempre en la vida, elegir significa hacerse cargo de las consecuencias. Elegir dejar un lugar mejor para nuestros hijos, elegir que ellos puedan disfrutar de los espacios verdes como lo hicimos de jóvenes, elegir que se bañen en los ríos y vayan a pescar, elegir que sigan tomando agua de la canilla y no estar preocupados por eso. Esta es una elección que trae muchas responsabilidades, pero que demanda poco tiempo, y tiene beneficios que serán los que condenen o preserven un estilo de vida. La Ciudad de Buenos Aires tomó la decisión política de controlar el tema de la basura, hay espacios en todas las comunas para separar residuos, que son casi la mitad de lo que desechamos por día en nuestras casas. No lleva más trabajo que tener dos bolsas o tachos, de lavar los envases que son reciclables, es generar un nuevo hábito que sólo trae beneficios. ¿Qué es reciclable? Papel y cartón, vidrio, metal y plástico.
La separación de residuos en origen genera como beneficios: - Se reducen las emisiones de gases que colaboran con el calentamiento global y el cambio climático. Del mismo modo, recuperar los materiales reciclables permite ahorrar energía. Cuando todos los materiales reciclables recuperados reingresan en el circuito comercial e industrial se reducen los gastos de energía y agua, que la industria necesita para su elaboración. - Fomentamos la inclusión social de los cartoneros, de los recicladores, ya que al separar los reconocemos como actores clave en el proceso de reciclaje. - Promovemos la industrial del reciclado, ya que estos materiales se reincorporan al sistema productivo como materias primas y se elaboran nuevos productos, evitando la extracción de materiales vírgenes. Por ejemplo, con 80 latas de gaseosa o conserva se puede elaborar una llanta. Con 40 botellas de plástico se elabora 1 buzo pólar. Con 8 cajas de cereales se puede elaborar un libro. - Por cada tonelada de plástico que se recicla, se ahorran 130 kg de petróleo. Es una manera de cuidar los recursos del planeta que no son renovables. - El papel y el cartón se fabrican con la celulosa de los árboles, si reciclamos una tonelada de papel, salvamos 22 árboles! Con 22 árboles hacemos una plaza. Hoy nos parece una locura fumar en un avión, pero recuerdo que pasaba, porque el cambio cultural, de hábitos sociales que nos beneficien empieza un día, de a poco, y su efecto multiplicador hace que la conducta que no es beneficiosa empiece a ser no deseada por la mayoría. No hay secretos para generar cambios, sólo se trata de una decisión interna de querer ser parte de una nueva forma de vida. Cuando hay decisión política y campañas de concientización es mejor, se acelera el proceso de cambio y las personas tomamos conciencia más rápido, pero no siempre sucede. Hay en Mercedes ONGs que se ocupan del tema. Apoyemos las iniciativas, seamos parte de ellas, averigüemos quién junta materiales reciclables y empecemos por casa a generar la revolución verde. Nuestros hijos merecen una ciudad como la que tuvimos de chicos. ¿Qué esperas para empezar?
* Josefina Iglesias Borrondo es mercedina, abogada, integrante del área de Construcción Ciudadana y Cambio Cultural de la Jefatura de Gabinete del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires
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Mercedes - Bs As - Argentina