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29/10/15
Tal cual informa la agenda AICA, la arquidiócesis de Mercedes-Luján cerró el 24 de octubre, en el monasterio carmelita de Luján, las actividades por el Año de la Vida Consagrada con una celebración por los 500 años del nacimiento de Santa Teresa de Avila. El arzobispo de Mercedes-Luján, monseñor Agustín Radrizzani SDB, presidió la misa de clausura en la que destacó que “el religioso elige a Dios y se entrega al prójimo”. En el Año de la Vida Consagrada, se destacó la labor de muchos hombres y mujeres que entregan su vida a Dios a través de las distintas congregaciones, con diversidad de origen, estilo y carisma. El encuentro tuvo lugar en el Carmelo de Luján, donde se celebró el quinto centenario del nacimiento de santa Teresa de Avila, doctora de la Iglesia. Allí, la madre superiora, hermana Alejandra Mansilla, reflexionó junto a más de 50 consagrados de la arquidiócesis sobre la vida de Santa Teresa. “Teresa sufre un cambio en su vida cuando deja de sentirse la protagonista de su vida y de su historia, cuando se le abren los ojos y se revela el verdadero sentido de la consagración: la gratuidad de Dios que es don, la gratuidad que es misericordia, la elección que Dios hace de cada uno”, destacó la religiosa. El encuentro culminó con la celebración de la Eucaristía presidida por el arzobispo de Mercedes-Luján, monseñor Agustín Radrizzani SDB, quien al hablar de la vida consagrada subrayó que “el religioso elige a Dios y se entrega al prójimo”.
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Mercedes - Bs As - Argentina