Con el vencimiento del contrato con la empresa “Elimpark” y en vistas de que el municipio tomará el sistema de estacionamiento medido para sí, tanto comerciantes como vecinos de la ciudad que realizan tareas o van de compras al radio céntrico se mostraron expectantes ante la posibilidad cierta de que puedan reverse efectivamente ciertas cuestiones que son más que problemáticas, como la prohibición del estacionamiento en ambas aceras o el estacionar a 45 grados en algunas arterias.

En estos días fueron consultados tanto comerciantes, como vecinos que trabajan en el radio céntrico, así como asiduos concurrentes a los negocios que allí se ubican. Los clientes y vecinos que trabajan en el centro manifestaron su descontento con el actual sistema, bregando en muchos casos por volver a situaciones anteriores, aunque no dejan de reconocer el crecimiento exponencial que ha tenido el parque de autos y motos en la ciudad. Además en el caso de los clientes señalan que deben hacer compras siempre “de apuro”, más pensando en el coche estacionado que en el hecho que los llevó al centro, lo que muchas veces no les permite ni recorrer vidrieras para ver las ofertas. En tanto, los comerciantes señalan que en el marco actual de crisis económica, sumar complicaciones para los clientes no es un buen camino de acción.

El estacionamiento medido desde su implementación siempre ha sido resistido, incluso con petitorios y marchas, pero por estos días han crecido los reclamos y también hubo quienes se llegaron hasta la Municipalidad para tratar de ser atendidos y plantear sus quejas.

“Desde 2014 los mercedinos estamos viviendo un pequeño infierno, principalmente por la falta de lugar para estacionar. No hay mercedino que tenga auto que no tenga más de una multa, cuando eso pasa no es porque todas las personas tienen ganas de cometer infracciones, sino porque hay una mala praxis en la medida. Y no conozco a nadie que no tenga que venir obligado al centro al menos una vez al mes”, dijo Walter, comerciante del rubro de prendas de vestir que se mostró expectante, al igual que otros consultados, en la posible y necesaria llegada de cambios en la implementación del sistema.

“Hay poco lugar”, coincide Juan, parado con las balizas sobre la mano derecha, mirando por el retrovisor si viene un agente de tránsito, mientras espera a su esposa que bajó a hacer un trámite. “Yo trato siempre de ponerme a la derecha como corresponde, y la izquierda debería estar libre pero acá hay muchos vehículos y se torna imposible. No hay conciencia y todos se manejan como pueden, además no hay información. Este sistema con tantos coches y motos es complicado. Conozco muchas ciudades y en ninguna se ven estos problemas. A veces es un desastre. Yo tengo 84 años y ando también en Buenos Aires y no veo estas cosas”, señaló.

Por su parte, Mariano, otro comerciante que trabaja en una esquina céntrica, señaló: “Esto es complicado. Cada vez hay más autos, no hay lugar en la parte céntrica, y de una sola mano es más complicado. Habría que volver al sistema anterior y poder usar las dos manos. La gente lo dice. Antes no se escuchaba el reclamo, pero ahora todos dicen que no hay lugar para estacionar, o que no ven cuando estacionan a 45 grados para salir. Esto no está bien hecho, debería cambiarse porque así se espanta a la gente que podría llegar a venir a comprar. Si uno espanta a la gente, tras que no se vende mucho, es peor”.

En tanto, Arturo, un vecino que trabaja en el radio céntrico, como empleado de Tribunales, también marcó su descontento: “No se ve solución a este descontrol actual. Hay poco lugar para poder estacionar. Uno a veces va y viene en reiteradas ocasiones, es difícil incluso acordarse donde deja el auto, y también es complicado poder hacer la carga de crédito en el sistema. Debería reverse si no es posible implementarse cambios, hacer algo más participativo para la gente, que puedan opinar, como corresponde en una reglamentación que genera un importante impacto, como es esta”.

Gastón, otro comerciante, describió: “Los reclamos son constantes. Se cuestiona que no se pueda estacionar de los dos lados, y que se saquen los 45 grados. No hay lugar de la  manera actual. Está bien que se cobre, pero de una manera ordenada y fácil. Hay desinformación actualmente sobre dónde se puede pagar, o dónde estacionar. Incluso a veces los agentes de tránsito mismo señalan que no paguen, y luego le hacen las multas y tratan a la gente como delincuente cuando se detienen. Así es que andan todos a las corridas, se deja de tener la venta de ocasión cuando alguien pasa caminando, viendo vidrieras, ya que están todos apurados para llegar al auto antes de que los multen”.

Por último, una automovilista, llamada Emilia, fue más allá y señaló una “táctica” que entiende se implementa: “Por las tardes hay una táctica evidente: se llegan todos los agentes, aprovechan la desesperación o el apuro de la gente que necesita algo antes de que cierren los negocios o se les haga tarde, y entonces empieza el festival de multas. También pasa en el horario de bancos. Se ven multas en los parabrisas por doquier, porque cuando la gente tiene una necesidad urgente para donde puede, ya que no hay lugar adecuado ni buena señalización”.

 

 

 

 

 

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