De 220 millones de dólares que el banco de desarrollo de América Latina CAF, aprobó para la Argentina, unos 120 millones estarán destinados a prevenir y mitigar los efectos de las inundaciones en la zona de influencia del Río Luján en la Provincia de Buenos Aires, mientras que USD 100 millones serán otorgados para contribuir al desarrollo institucional que permita incentivar las inversiones público-privadas en el país.

CAF -banco de desarrollo de América Latina-, aprobó dos préstamos para Argentina por un total de USD 220 millones, que contribuirán a prevenir y mitigar los efectos de las recurrentes inundaciones en zona de influencia del Río Luján en la Provincia de Buenos Aires y a impulsar las iniciativas público-privadas para contribuir a cerrar las brechas en materia de infraestructura.

“Estas operaciones representan un respaldo a las iniciativas encaminadas a mejorar las infraestructuras hídricas del país para prevenir los efectos de eventos climáticos extremos. Adicionalmente, complementan los esfuerzos que el gobierno argentino está realizando para promover inversión en el país y lograr una mayor inserción de la economía en las cadenas de valor globales”, afirmó Luis Carranza, presidente ejecutivo de CAF.

El primer préstamo, de USD 120 millones, se destinará a prevenir y mitigar  los efectos de las inundaciones y manejar controladamente los caudales, beneficiando de forma directa a más de 150.000 habitantes en la parte media y alta de la cuenca del río Luján, en la Provincia de Buenos Aires.

Los fondos se destinarán a la implementación de la segunda etapa del Plan de Manejo Integral de la Cuenca del Río Luján, que realizará obras de conducción y retención, acciones de ordenamiento territorial y de fortalecimiento institucional, con la finalidad de mejorar el manejo de la parte media y alta de la cuenca. Esta operación complementa los recursos otorgados por CAF el año 2016 para la implementación del Plan de Manejo Integral de la Cuenca del Río Luján en la parte baja de la misma.

Esta segunda etapa, que se desarrollará en los partidos de Chacabuco, Luján, Mercedes, San Andrés de Giles y Suipacha, contempla medidas estructurales tales como obras destinadas al incremento de la capacidad de conducción del cauce mediante el aumento de su sección, la ampliación de puentes en varios tramos de la cuenca y el establecimiento de áreas de retención temporal de excedentes hídricos para amortiguar los picos de las crecidas, entre otras acciones. Asimismo, el proyecto incluye medidas no estructurales de gestión territorial y ambiental para lograr una administración eficiente de la cuenca y para desarrollar marcos de gestión adecuados a las necesidades hídricas, territoriales, ambientales y socioeconómicas de la zona.
 

 

 

 

 

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