Durante la semana que pasó, el Partido Justicialista Bonaerense realizó la convocatoria a elecciones en toda la provincia. La fecha será el 17 de diciembre y no solo se votará al próximo presidente del partido en el territorio bonaerense, sino también en cada uno de sus distritos. Mercedes, desde ya, no será la excepción y también en la ciudad se deberá dirimir quien conducirá al PJ. Recordemos que la última elección fue en el año 2013, donde la lista que encabezaba Juan Pablo López cayó ante la que lideraba Carlos Selva, siendo éste el actual presidente del partido hasta la actualidad.

David Amaya, quien además de ser el actual Secretario General del Sindicato de la Carne fue concejal durante el período 2011-2015, vertió su postura respecto a la coyuntura actual del peronismo y las elecciones que se avecinan: “La próximas elecciones deben ser el primer paso hacia la unidad del Peronismo. Históricamente ha habido diferencias dentro del movimiento nacional justicialista de las cuales siempre se ha salido adelante. Ésta no debe ser la excepción. Los dirigentes deben poner las barbas en remojo, pulir las diferencias y fijar una agenda en común en pos de trabajar por la sociedad que está siendo avasallada”. Además sostuvo que “no es momento de andar viendo a qué lista apoyó cada uno en las últimas elecciones legislativas, porque el movimiento justicialista es mucho más amplio que eso y no puede dejar afuera a nadie que se sienta peronista”.

Consultado sobre si se debería dar una lista de unidad o elecciones internas, manifestó que “a veces se puede conformar una lista de unidad y otras es inexorable que exista una competencia interna, pero lo que más importa de esta elección es que se vuelva a dar un diálogo sano entre todos los sectores del Peronismo para que se pueda llevar a cabo un trabajo mancomunado. Hoy los dirigentes políticos tienen la oportunidad histórica de dejar egoísmos y diferencias de lado, para poder cambiarle la realidad al pueblo. No lograrlo, significará no estar a la altura de las circunstancias.”

Finalmente expresó que “la clase trabajadora siempre ha sido la columna vertebral del peronismo, por ello no puedo ser indiferente -como dirigente sindical- a lo que está sucediendo. Voy a hacer todo lo posible para que el peronismo vuelva a enamorar, y para que eso suceda, debe haber unidad”.

 

 

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