En el marco de las discusiones por el intento legislativo de despenalizar en aborto en la Argentina, fue consultado al respecto el doctor Pablo Cassiani, quien es secretario de Salud de la Municipalidad de Mercedes. “El aborto es la ejemplificación más clara del fracaso de las políticas tendientes a prevenir los embarazos no deseados, su principal causa”, dijo.

“Cuando uno habla de aborto, es porque llegó tarde. Tarde en las políticas de salud sexual y procreación responsable, en la educación sexual integral y en la accesibilidad a métodos anticonceptivos y la gratuidad de los mismos”, según Cassiani.

“El debate del aborto no soluciona el problema de fondo, no soluciona el problema del embarazo adolescente, no soluciona la problemática del embarazo no deseado, lo oculta, lo demora, lo patea para más adelante”, sostiene el director de Salud de Mercedes.

Tal cual apuntó el funcionario, en el año 2016, según el Ministerio de Salud de la Nación, murieron 286 mujeres durante su embarazo o puerperio, en lo que se conoce como mortalidad materna. “De estas, 43 fueron por abortos (tanto espontáneos como provocados). Estas lamentables 43 muertes representan el 0,025% de las muertes femeninas a nivel país para el mismo periodo. La principal causa de muerte materna en el mundo (como en Argentina) no es el aborto, sino las complicaciones obstétricas directas, como son las hemorragias durante el embarazo o puerperio, la eclampsia/pre eclampsia (complicación de la hipertensión arterial en el embarazo) y las infecciones obstétricas posparto. El aborto representa el 18% aproximadamente de los fallecimientos”, precisa Cassiani.

“La cifra es muchísimo menor a la cantidad de mujeres que mueren por año a causa del cáncer de cuello de útero, el único cáncer que cuenta con una vacuna para prevenirlo (Vacuna HPV a las 11 años) y ampliamente estudiado, fácil de detectar y con posibilidad de cura total. Sin embargo, siendo un terrible problema de salud pública no se encuentra en la agenda política, y es solapado por el reclamo del aborto legal”, afirma.

“En mi opinión profesional es un tema que no da soluciones a las principales problemáticas de la salud de la mujer, sino que por el contrario agrega más problemas, postergando el debate y la implementación de políticas que verdaderamente ataquen al nervio del problema sanitario, protegiendo la vida de la madre y también la del niño por nacer”, completa Cassiani.

 

 

 

 

 

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