Seis personas robaron la provisión semanal de leche, azúcar, yerba y té del merendero ubicado en calles 26 y 55, al que concurren diariamente medio centenar de niños de esa zona de la ciudad cada día para alimentarse.

Los ladrones ingresaron al galpón en el que funciona también el taller del referente barrial Juan Díaz tras romper una cerradura con un cortafierros, a las 3.30 de la madrugada de ayer. Cargaron lo que pudieron y huyeron a pie.

“Decidimos poner un comedor por el tema de la inundación y se fue quedando”, contó Díaz a NOTICIASMERCEDINAS.COM y explicó que al mismo asiste “gente de distintos barrios, el domingo no pensaba abrir pero vinieron 50 chicos y 20 madres, no les puedo cerrar la puerta”.

“Hay hambre, acá se nota mucho, hay miseria y necesidades”, afirmó Díaz y advirtió que “el horario del merendero es de cinco a seis y a las cuatro tenemos personas esperando”. “Esto se está desbordando, te agarra bronca por el robo pero también pensás cómo está la situación”, reflexionó.

“Tengo ayuda de gente de Cambiemos pero no estoy trabajando para ningún partido, este comedor surgió de una charla de vecinos, por ahora no hay ningún cartel político, el merendero no tiene ni nombre”, aclaró el referente barrial a este medio.

Destacó, sin embargo, la colaboración de Jorge Pirotta (Partido Fe), de Jorge Cossi (UCR) y del Club All Boys a través de Pelusa González (PRO), dirigentes de Cambiemos que reclamaron “que la policía atienda la denuncia que hizo nuestro responsable en el lugar, Juan Díaz".

“No debemos pasar por alto este atentado, al que no le damos ninguna connotación política pero esperamos que la Justicia haga lo que tiene que hacer”, expresó Pirotta y, consultado por NOTICIASMERCEDINAS.COM, opinó que “son rateritos”.

El dirigente de Cambiemos reconoció que “la situación es cada vez más difícil”. “Heredamos la destrucción de la cultura del trabajo, hay gente que rechaza capacitarse”, señaló y llamó la atención sobre “gente que changuea, no puede trabajar porque llueve y encima se le inunda la casa”.

“En los barrios la situación es compleja, los chicos no están acostumbrados a tomar leche, hay familias enteras que viven de los planes sociales, es una herencia complicada”, dijo también Pirotta a este medio.

 

 

 

 

 

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