Parece un mal sueño pero todo indica que terminará siendo una triste realidad. Tal cual señaló esta noche a este medio Alejandro Falabella, secretario general de la Asociación Obrera Textil, la planta Karavell confirma drásticamente su cierre. “En Karavell ya tienen la orden de que mañana no entre nadie a trabajar”, dijo el dirigente gremial de los textiles.

Aunque los gremialistas de la Asociación Obrera Textil no lo podían confirmar a la misma hora que muchos empleados ya estaban agarrándose la cabeza, este miércoles por la tarde,  el cierre definitivo de Karavell tras meses de crisis sería una realidad.

“Hablé con el gerente de planta y me dijeron que le dieron la orden desde capital”, dijo Falabella esta noche a NOTICIASMERCEDINAS.COM. “Dicen que tienen la orden de que mañana no entre nadie a trabajar”, aclaró y puntualizó que en el marco del plan de pagos que venían intentando cumplimentar, desde Karavell “tendrían que haber pagado la semana pasada y mañana se reiniciarían las acciones de fuerza”, lo que podría haber precipitado este accionar.

“El reclamo seguirá vía ministerio y en asamblea con la gente veremos cómo sigue la historia. Haremos una presentación diciendo que el acta no se cumplió. Pero la empresa si tiene la decisión tomada de cerrarla no la cambiará”, agregó Falabella, destacando asimismo que los perjudicados con esta medida de cierre entre la planta de Mercedes y las oficinas de la Ciudad de Buenos Aires son unos 65 empleados, incluyendo administrativos y operarios.

Una audiencia en Capital
Lo que se supo es que hoy la suerte de la planta se habría decidido en una audiencia en capital a la cual fue parte del secretariado nacional. Como se había dado a conocer con anterioridad, la empresa había presentado un procedimiento de crisis y el ministerio no se lo había abierto porque todavía no había cumplimentado con toda la documentación que le había solicitado. Así es que se la intimó entonces a la empresa a “no tomar ninguna medida”.

La empresa había manifestado en el pedido de apertura de crisis la intención de cerrar, pero se creía que era a fin de año como pronto y que podría haber otras variables.

La tristeza en los empleados
La sensación de tristeza embargó de inmediato este miércoles a los empleados que se quedaban en la calle, tras los comentarios que corrían como reguero de pólvora y no hacían más que confirmar el inminente cierre, e incluso que se llevarán en breve las maquinarias de la planta de Acceso Manuel Sanmartín.

Un empleado que hace 14 años que está trabajando en la fábrica no quiso dar su nombre, por temor a represalias, pero describió a NOTICIASMERCEDINAS.COM: “Tomamos mal esta noticia, aunque ya lo teníamos asumida. Es una complicación, no es bueno quedarse sin trabajo”.

“Hubo una reunión en Buenos Aires hoy y el cierre estaba sabido. En el ministerio se hizo el procedimiento de crisis y se hablaba de que lo hacían para negociar. Incluso nos dijeron que enviáramos telegramas intimando al pago, porque se veía venir el cierre. Nosotros no sabíamos que la empresa estuviera intimada a no cerrar. Lo que sí tenemos en claro es que cerca de 65 familias entre operarios quincenales, mensuales y administrativos se quedan en la calle”, agregó y comentó que desde esta noche hay apostado en la puerta de la planta un auto de seguridad para cuidar que nadie entre a trabajar en el día de mañana jueves. “AOT no nos comunicó nada aun, lo que sabemos es por SETIA”, dijo sobre lo actuado por los gremios.

“Acta de defunción a las industrias”
El panorama sombrío en el plano laboral para Mercedes si se tiene en cuenta el reciente cierre de Guilford, generó la consulta de este medio al intendente municipal, quien se mostró muy preocupado y compenetrado en la situación.

Juan Ignacio Ustarroz también fue consultado por este medio: “El sistema económico está llevando al acta de defunción a las industrias a través de la bicicleta financiera, la apertura indiscriminada de importaciones, de la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores con paritarias por debajo de la inflación, a través de los tarifazos”, dijo Ustarroz.

“Están haciendo algo que parece increíble y quieren que la gente no se enoje. Pero es muy difícil tomarse esto con calma”, opinó el intendente de la ciudad.

“El 50 por ciento no se puede aceptar”
En estas horas aciagas para los empleados de Karavell se dijo que les habrían ofrecido el 50 por ciento de la indemnización, y que eso se les pagaría de acuerdo a nuevas leyes. En este sentido, fue consultado Jorge Retegui, delegado del Ministerio de Trabajo en Mercedes, quien se mostró sorprendido por la situación: “Teníamos confirmado un procedimiento preventivo de crisis que se estaba trabajando en Nación. Venían con atrasos en los pagos, hay más de 50 trabajadores involucrados en esto. No sabemos si es cierto el cierre porque no lo comunicaron, pero no pueden hacer esto de un día para el otro”, según Retegui.

“Deberían haber hecho algún ofrecimiento y no debe aceptarse el 50 por ciento. Van a tener que justificar qué es lo que sucede y los fondos tendrán que buscarlos de donde sea. No pueden dejar en la calle a gente que ha generado riqueza a la empresa. Parece mentira la irresponsabilidad que tienen las empresas textiles. Guilford ya dejó a la gente en la calle y esta empresa Karavell está haciendo lo mismo. La empresa tiene su derecho a poner fin pero hay que darle posibilidades a la gente de que busque otro trabajo, hacer retiros voluntarios, buscar alternativas”, completó el delegado regional Jorge Retegui.

 

 

 

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