Cigarrillos electrónicos, saborizados y clubes de fumadores, en la mira. Avance legislativo contra el tabaquismo: “Vamos rumbo a un cambio sustancial en la Provincia”, afirmó el Defensor Adjunto de la provincia de Buenos Aires, Walter Martello.
Walter Martello, Defensor Adjunto de la provincia de Buenos Aires, participó en una jornada donde se expusieron los alcances del proyecto impulsado por la diputada Alejandra Lordén para reformar la ley de Humo Cero que está vigente. La iniciativa pretende impedir la venta de cigarrillos sueltos y regular la comercialización de saborizados y vaporizadores en territorio bonaerense. También se busca prohibir la exhibición y publicidad de productos vinculados al tabaco y sus derivados en puntos de venta como kioscos y supermercados.
El proyecto de Lordén fue el eje de la jornada “Avance legislativo para el control de tabaco”, realizada en el anexo de la Legislatura e inaugurada por el presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Manuel Mosca. También participó la legisladora Julieta Centeno, presidenta de la Comisión de Salud del Senado, y representantes del Poder Ejecutivo nacional y provincial. Entre ellos, la Dra. Carmen Storani, directora provincial de Salud Comunitaria y Entornos Saludables y No Violentos del Ministerio de Salud Bonaerense, y la licenciada Silvia Rey, coordinadora del Programa Provincial de Control de Tabaco.
El Defensor del Pueblo Adjunto alertó que las estrategias publicitarias de la industria tabacalera se han ido modificando en los últimos años. “Realmente la iniciativa de la diputada Lordén permite dar respuestas a muchos baches de la actual ley antitabaco en la Provincia, que ha quedado absolutamente desactualizada ante las estrategias de las tabacaleras. Por ejemplo, con el objetivo de conseguir más consumidores jóvenes, estas empresas apelan a los denominados influencers, es decir, modelos que glamourizan los cigarrillos. También contratan jóvenes con miles de seguidores en las redes sociales para que difundan fotos con cigarrillos Marlboro, Lucky Strike, entre otras marcas”, destacó Martello, quien está a cargo del Observatorio de Adicciones y Consumos Problemáticos de la Defensoría.
“Estamos comprometidos en una férrea protección del derecho a la salud de todos los bonaerenses, y por ello desde la Defensoría del Pueblo queremos aportar para que haya un marco normativo que contribuya a hacer frente a una adicción, como el tabaquismo, que provoca miles de muertes al año”, concluyó Martello.
El Dr. Cesar Di Giano, presidente de la Unión Antitabáquica Argentina, alertó durante su exposición que “el futuro próximo de los fumadores será electrónico”. En ese sentido, informó que una de las principales tabacaleras del mundo ha invertido más de 18 mil millones de euros para el desarrollo un de nuevo cigarrillo IQOS que, pese a que es promocionado como una alternativa para dejar de fumar, sería igual de tóxico que los cigarrillos normales al contener una cantidad similar de nicotina similar y otros aditivos. En ese megaproyecto participaron 400 científicos que son expertos en biología, química, matemática, informática, ingeniería alimentaria, entre otras disciplinas.
El proyecto de Lordén avanza sobre los clubes de fumadores que funcionan en las salas de bingo de la Provincia, modalidad que posibilita a las empresas de juego esquivar la regulación actual que prohíbe el consumo de tabaco en lugares cerrados de acceso público. En esa dirección, la iniciativa legislativa, que actualmente se debate en la Comisión de Adicciones de la Cámara de Diputados, también busca prohibir fumar y/o usar vaporizadores en lugares como estadios de fútbol, parques y edificios públicos.
La abogada y directora del Área legal de la Fundación Interamericana del Corazón en la Argentina, Belén Ríos, destacó que “es muy importante que la nueva ley que se busca aprobar en la Provincia no repita los errores de la legislación nacional respecto a los clubes de fumadores. No hay ninguna razón por la cual se permita que se pueda fumar en los casinos: los clubes de fumadores son una forma de burlar la ley, ante la falta de reglamentación”.