La víctima fue internada en “estado reservado” con quemaduras. Causó alarma la magnitud del estallido en calle 10 y 21 que rompió vidrios en el barrio. Trabajan tres dotaciones de Bomberos.
Una mujer permanece internada en “estado reservado” en el Hospital Dubarry por las quemaduras sufridas esta tarde en la explosión e incendio de una vivienda en calle 10, casi esquina 21, donde trabajan los Bomberos.
El estampido, cerca de las 16 horas, generó alarma en la zona, en cercanías del colegio y jardín San Patricio, ya que por la onda expansiva se rompieron vidrios de varias casas. “Fue tremenda”, dijeron vecinos. Su origen aún no se determinó con claridad, pero podría tratarse del estallido de una garrafa.
A las 17 horas, tres dotaciones de Bomberos proseguían con las tareas en el lugar e intervenía también Policía Comunal y Protección Civil del Municipio. Fuentes policiales informaban que una mujer debió ser hospitalizada, mas a esa hora no confirmaban su identidad.
La casa quedó muy destruida por lo que procedió a cortarse la calle y evalúan el riesgo de derrumbe del inmueble. Maquinarias municipales también debieron intervenir en el lugar.
Según trascendidos la garrafa se la habrían entregado nueva pero estaría perdiendo. Esto habría generado la explosión en la pequeña vivienda de dos pisos cuyo espacio superior fue brutalmente destruido. Asimismo la explosión afectó severamente a la casa lindera de la esquina, también de dos plantas.
Según se pudo precisar luego por testimonio de vecinos que procedieron al rescate en la urgencia, junto a la señora, había dos nenes, sus nietos, que resultaron casi ilesos de milagro. «La puerta voló más de 50 metros cruzando las vías», contaron.
El incidente del gas habría sido un tubo que tendría una pérdida. Policia científica tendrá la palabra final con las pericias.