No hay ninguna duda de que la saga “Toy Story” ha atrapado a toda una generación de niños y grandes con sus impecables y divertidas aventuras en las que Woody y Buzz tienen por delante múltiples e increíbles desafíos en un mundo en el que son animados, hablan y se comportan de manera “humana” mientras no cumplen la función de juguetes ante los niños.
Y la cuarta parte de esta película se estrenará a nivel mundial siendo el Cine Mercedes uno de los sitios donde podrá verse el próximo jueves 20 en simultáneo con todas las grandes salas. Las entradas ya están en venta y seguramente el éxito en la taquilla hará que durante varias semanas la película permanezca en cartel en el cine de calle 20 entre 29 y 31.
En esta ocasión, el popular Woody aparece como el guardián de Forky, un juguete creado por Bonnie, su nueva dueña tras ser cedida como un noble gesto por el adolescente Andy en la última cinta. Forky tendrá una crisis de identidad, porque en realidad es un tenedor con plastilina, y se fugará de casa y Woody acudirá en su busca y por el camino encontrará a Bo Peep y su nueva vida.
Woody siempre se ha sentido confiado sobre su lugar en el mundo, y su prioridad ha sido siempre cuidar a su dueño, ya sea Woody o Bonnie. Por ello, cuando el nuevo trabajo manual de Bonnie se convierte en un juguete llamado Forky se declara ‘basura’, Woody buscará convencerlo de que abrace su destino como juguete y por qué es tan bueno serlo.
Sus planes serán interrumpidos por un sorpresivo viaje familiar. Este paseo incluirá una reunión con su antigua novia Bo Peep. Luego de muchos años por su cuenta, Bo se ha convertido en un espíritu aventurero, por lo que Woody y ella se dan cuenta que tienen conceptos de lo que es ser un juguete muy diferentes.
Finalmente, esta discusión será el menor de sus problemas, ya que deberán enfrentarse a nuevos retos para llegar de una sola pieza con Bonnie nuevamente.