, dirigente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), que incluye el siguiente texto: “Juan Grabois. 36 años. Cero aportes. C E R O…. nunca laburó….Pero representa a los ‘trabajadores’. Merecemos ser exterminados por una plaga de ladillas hambrientas” (sic). El posteo se compartió 21 mil veces en esa red social. Sin embargo, lo que indica es falso.
Juan Grabois es fundador y referente del MTE y de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP). Se recibió de abogado en octubre de 2010, como se puede ver en su título enviado por él mismo a Reverso, y actualmente trabaja como jefe de Trabajos Prácticos en la materia Teoría del Estado en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA), en la comisión de Roberto Andrés Gallardo, profesor adjunto regular de la materia y juez en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad. Ambos datos fueron confirmados a este medio desde la UBA.
Según la página oficial de la Superintendencia de Riesgos de Trabajo, organismo que depende del Ministerio de Producción y Trabajo de la Nación, Grabois está en relación de dependencia con esa institución (ver acá), que le pagó los aportes al menos en los últimos cuatro meses, como se puede ver en el resumen de su situación previsional (ver acá).
Según los datos que aportó a este medio y que se pueden ver en este documento, desde diciembre de 2003 sus empleadores fueron: la UBA, Teletech Argentina SA, LP y Asociados Sociedad de Responsabilidad Limitada, Instituto Parroquial Inmaculada Concepción A 183, Fundación Universidad Católica Argentina, Escala Sur SA y Cabal Cooperativa de Provisión de Servicios LTDA.
Además, según dijo Grabois a este medio, cobró “regalías de $235 mil” de Editorial Planeta por su libro La clase peligrosa publicado en octubre de 2018. La editorial confirmó a Reverso los dichos del dirigente del MTE y adelantó que Grabois sacará un nuevo libro con Editorial Paidós.
En AFIP, Grabois figura como monotributista con la categoría “B” y la actividad “Servicios personales N.C.P”
(que significa “Actividades o servicios no clasificados en otra parte”) en la subcategoría “Servicios de Asociaciones y Servicios Personales”. Esto significa que está habilitado para facturar no por productos, sino por servicios.
“Trabajé de un montón de cosas, en blanco y en negro, como empleado y como autónomo, desde que me independicé en 2001 -dijo el dirigente social y detalló-. Entre otras cosas, fui profesor particular para alumnos de la ORT, telemarqueter hasta que tuve una úlcera por tomar analgésicos para bancarme el dolor de espalda de ese laburo, vendedor técnico y analista funcional de software de administración documental para una empresa nacional de IT (LPA) realizando tareas tercerizadas de Tecpetrol, Petrobras y otras, consultor técnico y gerente comercial de un call center llamado Escala Sur, teleoperador de Teletech, Search Engine Optimicer y coordinador de un equipo de traductores del portal WorldBy, docente de la secundaria parroquial de Constitución, docente de un terciario, docente universitario en la UBA y la UCA, editor, traductor y autor para varias editoriales”.
Esta nota es parte de Reverso, el proyecto periodístico colaborativo que une a más de 100 medios y empresas de tecnología para intensificar la lucha contra la desinformación durante la campaña.AutoresROSARIO MARINAEditoresLAURA ZOMMER | CECILIA BECARÍA