La Secretaría de Seguridad de Mercedes junto a personal de la Agencia Nacional de Seguridad Vial controló el sábado por la noche a 246 vehículos, detectando 37 conductores que habían consumido bebidas alcohólicas, 15 de ellos por encima de los límites permitidos.
De este modo, puede determinarse que el 15 por ciento de los conductores habían consumido alcohol y un 6 por ciento del total lo había hecho en un grado que resulta punible por las leyes de tránsito.
Un estado de alcoholemia “positiva punitiva” se registra cuando se conduce:
– Cualquier tipo de vehículos particulares con una alcoholemia superior a 500 miligramos por litro de sangre.
– Motocicletas o ciclomotores con una alcoholemia superior a 200 miligramos por litro de sangre.
– Vehículos destinados al transporte de pasajeros de menores y de carga, cualquiera sea la concentración por litro de sangre.
El mínimo consumo de alcohol reduce los reflejos e incrementa las posibilidades de siniestros viales.
Aunque con registros por debajo de estos valores los conductores no son penados, se considera que el mínimo consumo de alcohol reduce los reflejos e incrementa las posibilidades de siniestros viales.
Los operativos se realizaron en el marco del Programa de Alcoholemia Federal y participaron inspectores de la Secretaría de Seguridad del Municipio, Policía Comunal, personal de la Agencia Nacional de Seguridad Vial y el apoyo del grupo GAD.
El subsecretario de Seguridad, Gonzalo Anselmo, encabezó los dispositivos que se montaron en los Pórticos de Acceso a la ciudad, sobre la avenida 40 y en Acceso Sanmartín. “Algunos cuadriplicaron lo permitido de alcohol en sangre al volante”, informó.
Por su parte, Nancy Okos, coordinadora de Seguridad, destacó “el excelente desempeño del personal que estuvo a cargo del control y de la fiscalización”. Recordó que los siniestros viales son la primera causa de muerte en jóvenes entre los 15 y 35 años.
