Al día de hoy, nuestro país se ha posicionado como un notable productor y exportador de miel, debido a las condiciones climáticas y avances tecnológicos que hacen que la calidad sea un sello reconocido a nivel internacional.
Entre los países productores, la Argentina se encuentra en el tercer lugar a nivel mundial, a la vez que concentra el 25 % de la producción de todo el continente y compite con grandes mercados como Estados Unidos y España (primer país productor de miel en Europa).
La miel, como producto natural que proviene de las abejas, es un manjar funcional, cuyo consumo ha crecido en los últimos años por sus propiedades nutricionales. De acuerdo al sitio web GuiaDeSuplementos, dichas propiedades provienen de las vitaminas del complejo B, D y E, además de la variedad de antioxidantes y aminoácidos. Asimismo, la miel favorece la producción de energía por su gran aporte en azúcares, entre un 75 y 80 %, convirtiéndose en un alimento ideal para personas anémicas o convalecientes.
En este contexto del llamado boom apícola, han surgido diversos emprendimientos con el objetivo de mejorar el rendimiento de la producción de miel, agregando nuevas tecnologías en los cultivos y contribuyendo al desarrollo de una industria que está en constante crecimiento.
Fue así como nació Beeflow, empresa dedicada a tecnologías de polinización de cultivos, que ingresó al mercado de la apicultura por la necesidad de mejorar y perfeccionar la cadena productiva de la polinización. «No todas las flores producen frutos de la calidad y tamaño deseados. Desarrollamos abejas fuertes e inteligentes para resolver esta ineficiencia», explican desde su sitio web oficial.
El trabajo de Beeflow
Fundada por el administrador de empresas Matías Viel en 2016, la empresa con sede en Los Ángeles y Buenos Aires hace uso de las tecnologías y conocimiento en polinización para ayudar a los agricultores a mejorar los rendimientos de cultivos como arándanos y almendras hasta en un 90 %. Al mismo tiempo, reducen en un 70 % la tasa de mortalidad de las abejas, que son esenciales para la biodiversidad y la agricultura sostenible.
Su trabajo consiste en integrar su conocimiento sobre el comportamiento de las abejas frente a un ambiente específico, junto a los manejos que realizan los productos en el campo, para potenciar su actividad.
Por otra parte, utilizan suplementos nutricionales a base de plantas, cuyo impacto es positivo en la actividad polinizadora de las abejas. Asimismo, utilizan tecnologías que ayudan a las abejas a mejorar en hasta 7 veces la polinización en temperaturas más frías.
En un reciente comunicado, la empresa anunció el cierre de su ronda de inversión Series A por USD 8.3 millones, liderada por Ospraie Ag Science, Future Ventures, Vectr Ventures, SOSV y Grid Exponential.
Sobre esta ronda de inversiones, Viel comentó que se encuentran entusiasmados de trabajar con inversiones que creen que las abejas cumplirán un rol importante en la transición hacia un sistema más sustentable y regenerativo.