Con un show deslumbrante en lo que hace a la puesta en escena y efectos, y con el despliegue de sus alumnas y bailarines invitados de primer nivel, la Escuela de Danzas “Giselle”, de Gisela Bufager, estuvo celebrando este fin de semana con sendos espectáculos entre sábado y domingo, sus 30 años con la danza.
Además en la oportunidad se dio a conocer el cambio de nombre del espacio vivo de ate y movimiento, a “Boulevard Dance”, contando como directoras y corógrafas a Gisela Bufager y Camila Mazzola.
El espectáculo contó con dos partes y en la primera hubo una adaptación de “Paquita” con coreografías de Gisela Bufager. Así se sucedió la presentación e inicio pas de troix, cuerpo de baile, individuales de Candela de Caterina, Brisa de Canto y Delfina Lértora, para dar lugar a un dúo de Lucila Sánchez y Magalí Merlini. Luego seguirían una Coda pas de troix, el grupal infantil, un individual de Marisa Lettieri, un grupal de alumnas principiantes, otro cuerpo de baile, la introducción al pas de deux y el pas de deux, para dar lugar a una nueva aparición del cuerpo de baile y despliegues individuales de Martina de Andrés, Camila Mazzola, Cristian de Jesús Rivero y Ana Falabella. El cierre de la primera parte fue con una coda y los aplausos del público.
La segunda parte y luego de un intervalo dio comienzo con escenas de tango con la banda de sonido de Moulin Rouge y coreografía de Cristian Rivero, quien la bailó acompañado por su sobrina y despertó los mayores aplausos de la noche. El ritmo de milonga seguiría junto al tango y tango electrónico, con coreografías de ambas directoras de la escuela de danzas.
A continuación hubo un break y se proyectó el video con las trayectorias en su aprendizaje de Brisa de Cunto y Delfina Lertora Dicatarina que se recibieron de Profesoras Superior de Danzas Clásicas.
Inmediatamente y de nuevo en el escenario configurado como pista de baile Cristian Rivero deslumbró a todos con un solo de flamenco y gran nivel.
Y el cierre fue con el ritmo moderno y variadas coreografías, que incluyeron de todo un poco, con detalles de efectos especiales, iluminación y sorpresas como el «Hallelujah» por Lisa, sin dejar de lado el reggaetón y otros muy bailables, en un continuado hasta el saludo final con todos.