El ministro del Interior, Wado de Pedro, aseguró que «existe consenso en que las bases productivas de Argentina tienen que ver con el desarrollo del campo, la industria y la producción» al participar esta mañana del Ciclo de Encuentros “Desayunos Iberoamericanos” organizado por la Fundación Embajada Abierta y la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI).
Del encuentro desarrollado en la sede de la Organización de Estados Iberoamericanos en Argentina (OEI) participaron el embajador de Argentina en Estados Unidos, Jorge Argüello; y el director de la Organización de Estados Iberoamericanos, Luis Scasso, junto a 30 representantes de diversos sectores empresarios, diplomáticos y políticos, además de referentes sociales.
“La competencia política tiene que suceder por encima del modelo productivo de país” planteando una estrategia “que permita que el pueblo pueda trabajar y ser feliz en cada rincón de la Argentina”, sostuvo Wado de Pedro.
En ese contexto, el titular de Interior aseguró que “Argentina debe encontrar un mecanismo para su funcionamiento, más allá de quién esté llevando adelante las responsabilidades de gobierno” y, en ese sentido, argumentó que “ya no puede estar en discusión la matriz productiva argentina y el ingreso de los trabajadores”.
El funcionario del Ejecutivo destacó que encontró “en los gobernadores y gobernadoras el piso para generar un consenso de todas las fuerzas políticas en el sentido de impulsar obras de infraestructura y de defender la matriz productiva de cada provincia y cada región” y resaltó la necesidad de focalizar “las inversiones en las obras que más generen trabajo argentino.”
En ese sentido, recordó que, junto al resto de las carteras y los gobernadores y gobernadoras del país, “hicimos un relevamiento de todas las obras que se necesitaban en Argentina para cumplir con ese objetivo de federalismo”, de cuyo proceso -debatido además con los sectores productivos- “surgió por consenso la necesidad de encarar, en el marco de un plan de desarrollo federal, 1.580 obras estratégicas de infraestructura para potenciar el perfil productivo de Argentina, y generar un país con muchos polos de desarrollo”.
El funcionario nacional evaluó como positiva la misión de cooperación científico – tecnológica del manejo del agua a Israel, realizada en abril pasado junto a gobernadoras y representantes de 10 provincias de todas las regiones de nuestro país, que aportó conocimiento y experiencias para que, en el marco del plan de desarrollo federal, se impulsen obras que permitan “sumar tierras productivas de manera sustentable, organizando la logística del agua”.
Así como la última gira por Estados Unidos realizada a fines de septiembre junto a los gobernadores de la región del Norte Grande, signada por una nutrida agenda que incluyó encuentros con inversores, organismos multilaterales y reuniones políticas en las que se analizaron las oportunidades de inversión en las 10 provincias que integran la región. De esa gira, informó de Pedro, surgió el notorio interés del Banco Mundial “en participar del aporte para el plan de desarrollo federal, con lo cual para nosotros el viaje ya fue un éxito”.
Participaron también del encuentro: Carolina Moises, diputada nacional; Diego Buranello, director de Asuntos Corporativos Cono Sur de Danone; José Urtubey, director de Celulosa Argentina; Marcelo Stubrin, ex embajador de Argentina en Colombia; Mario Oporto, subsecretario de Relaciones Internacionales e Institucionales de Jefatura de Gabinete de Ministros; Matías Szapiro, gerente de Asuntos Públicos y Gubernamentales de ExxonMobil; Rosana Bertone, diputada nacional; Diego Marías, legislador de Ciudad Autónoma de Buenos Aires; Gerardo Martínez, secretario general de la UOCRA; Martín D’Alessandro de la Sociedad Argentina de Análisis Político; Martín Cabrales, vicepresidente de Cabrales S.A.; Abel Furlán, secretario general de la UOM; Cristina Álvarez Rodríguez, ministra de Gobierno de la provincia de Buenos Aires y Carlos Graco, rector de la UNSAM, entre otros.
La OEI es un organismo de cooperación multilateral entre países iberoamericanos de habla española y portuguesa, con más de 3.000 integrantes en toda la región.
El organismo -que concibe a la educación, la ciencia y la cultura “como herramientas para el desarrollo humano y generadoras de oportunidades”- trabaja directamente con los gobiernos de sus 23 países miembros, respondiendo a sus prioridades y fortaleciendo sus políticas públicas a través de diversos programas y proyectos.
Los Estados miembros de la OEI son: Andorra, Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, España, Guatemala, Guinea Ecuatorial, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Portugal, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.
Mientras que los países observadores de la OEI son: Angola, Cabo Verde, Guinea-Bisáu, Luxemburgo, Mozambique, Santo Tomé y Príncipe y Timor Oriental.