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Regresan al mar dos lobos marinos recuperados por la Fundación Mundo Marino

Dos lobos marinos pudieron recuperarse de heridas provocadas por elementos de origen antrópico y regresar al mar. Uno de ellos fue asistido el pasado 12 de febrero, inicialmente por la Fundación Rescate Verdemar en la localidad de Villa Gesell, por presentar una profunda herida en su aleta derecha. La Fundación Mundo Marino acudió a esa localidad y lo trasladó a su centro de rescate. El otro animal fue rescatado pocos días después, el 15 de febrero, a partir del llamado de un turista que alertó a la Fundación Mundo Marino acerca de la presencia de un lobo marino varado en una playa del Partido de la Costa, cerca del límite con Pinamar.

En el caso del animal rescatado en el Partido de la Costa, cuando ingresó al Centro de Rescate, lo primero que hicieron los veterinarios fue proceder a quitarle el zuncho plástico que le había generado una profunda herida en su cuello. “El zuncho había cortado varias capas del músculo del animal en la zona afectada. Lo extrajimos y limpiamos toda el área de la herida para quitar el tejido muerto y favorecer la regeneración de los tejidos. Como la herida estaba infectada, le administramos antibióticos de manera sistémica, así como analgésicos para aliviar el dolor”, explicó Juan Pablo Loureiro, médico veterinario y director técnico de la Fundación Mundo Marino.

Como parte del protocolo médico veterinario, en ambos casos se tomaron muestras de sangre y de material fecal. “El mismo procedimiento realizamos con el otro lobito que tenía una herida de tipo cortante en su aleta derecha. No parecía ser algo provocado por otra especie, como podría ser un depredador, sino por algún elemento cortante de origen antrópico, es decir, por el hombre”, aclaró Loureiro.

Luego de ingresar al centro de rescate, los veterinarios pudieron extraer del cuello del animal un zuncho plástico, comúnmente utilizado para embalajes de tipo industrial, el cual le había provocado una herida cortante y profunda. Se suman al caso de un lobo marino que, a principios de este año, fue asistido por presentar una herida en su cuello producto de un fragmento de red de pesca.

Con el transcurso de los días, desde el momento de su rescate, ambos animales respondieron satisfactoriamente al tratamiento veterinario, mostrando una buena actitud alimenticia y comportamental. En ese sentido, se procedió a darles el alta médico veterinaria y a regresarlos al mar durante la mañana de este lunes 4 de marzo, en las playas de San Clemente.

Otro caso reciente
Un animal de la misma especie había sido asistido por la Fundación Mundo Marino a principios de este año, en una playa ubicada entre las localidades de San Clemente y Las Toninas. Advertidos de la presencia del animal por Defensa Civil del Partido de la Costa, la Fundación Mundo Marino acudió a su rescate y lo trasladó a sus instalaciones para su rehabilitación. Los veterinarios constataron que un fragmento de red de pesca le había provocado una herida cortante en la zona de su cuello. Luego de superar el proceso de rehabilitación satisfactoriamente, pudo regresar al mar a principios del mes de febrero.

Acerca del Arctocephalus australis
Como sucede en el caso de otras especies de pinnípedos, esta especie es polígama y paren una cría al año. Pertenece a la familia de los otáridos y se diferencian de los fócidos (focas), por poseer pabellón auricular detrás de sus ojos y por utilizar sus aletas posteriores para la locomoción (las focas, en cambio, reptan con el vientre). La distribución del Lobo de Dos Pelos es amplia y va desde la Isla de Marco, en Uruguay, hasta la Isla Mayorca, en Perú. Existen grandes agrupaciones de esta especie en islas uruguayas como son la Isla de Lobos, Islas de Torres, e Islas de Castillo Grande, en el norte del Estuario del Río de la Plata. Su nombre se debe a que poseen 2 capas de pelo: una interna, impermeable que mantiene la piel seca, y otra externa, que cubre a la primera y otorga el color al animal.

Los machos alcanzan una longitud cercana a los 2 metros y un peso de 150 kilogramos, en tanto que las hembras llegan a medir 1,40 metros y pesar hasta 60 kilogramos.

Respecto a la alimentación esta especie se alimenta de langostinos, camarones, calamares y distintos tipos de peces.

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