En el marco de los Carnavales 2025 de Mercedes, la histórica murga «Lesionados por el Corcho» regresa con una puesta en escena que promete sorprender al público.
Bajo el título «Siga al Conejo», la agrupación propone una versión propia y murguera del clásico Alicia en el País de las Maravillas.
Para conocer más detalles, conversamos con una de las creadoras del grupo, la licenciada Gabriela Florella.
—¿Cuánto tiempo llevan preparando la presentación para este carnaval y cuál es la dinámica de trabajo que tienen?
—Estamos preparando este tema desde hace un año, aunque en realidad es una idea que venimos barajando desde hace mucho tiempo. Siga al Conejo es nuestra versión de Alicia en el País de las Maravillas, una historia que siempre nos llamó la atención y que finalmente decidimos llevar al corso. Desde hace más de un año venimos trabajando en la puesta en escena, la música, el vestuario y la coordinación de los ensayos.
—¿Qué pueden contarnos sobre la temática elegida en esta oportunidad?
—Nos pareció interesante abordar el mundo de Alicia desde la perspectiva de la sorpresa y lo extraordinario. La idea de seguir al conejo y caer en la madriguera simboliza ese viaje al asombro, a lo inesperado. En nuestra versión, queremos transmitir esa sensación de maravilla, pero en el sentido más amplio de la palabra, no solo lo bello, sino también lo extraño, lo sorprendente.
«Nos pareció interesante abordar el mundo de Alicia desde la perspectiva de la sorpresa y lo extraordinario. La idea de seguir al conejo y caer en la madriguera simboliza ese viaje al asombro, a lo inesperado»
—Desde la experiencia y trayectoria de la murga, ¿cómo ven la evolución del carnaval local? ¿Han crecido y mejorado las celebraciones?
—Participamos en los corsos desde hace 33 años y hemos visto muchos cambios. Nuestra convicción es que cualquier transformación debe preservar la identidad del Carnaval Mercedino. El corso es espuma, tarros, perros, agrupaciones diversas expresándose libremente. Hay aspectos que deben mejorarse, como la organización del sonido, que es un desafío constante. Sabemos que desde Cultura han escuchado las necesidades de las agrupaciones y este año hay nuevas propuestas, como animadores en cada punto del recorrido. Es un trabajo en construcción.
—En el contexto actual, ¿qué significa para ustedes poder llevar adelante esta propuesta artística popular?
—El carnaval es, ante todo, una fiesta colectiva y popular. Es un espacio de diversidad, de encuentro. Nos parece fundamental que siga siendo gratuito y organizado desde el Estado municipal, porque garantiza que sea accesible para todos. En tiempos donde los espacios de participación se ven reducidos, el carnaval sigue siendo un lugar de expresión libre y compartida.
—¿Qué los motiva a seguir participando año tras año?
—La locura, sin dudas (risas). Cada año nos preguntamos cómo seguimos haciendo esto, pero la respuesta es simple: lo amamos. Es un placer disfrazarse, jugar, ser alguien distinto por un rato. A pesar del esfuerzo, los ensayos, las dificultades, cada febrero sentimos la misma emoción y nervios cuando llega el momento de salir a la Avenida 29.
—¿Quiénes son los responsables de cada tarea dentro de la murga? ¿Cuántos integrantes tienen actualmente?
—El equipo es enorme y fundamental. En la dirección musical está Fito González, con Enzo Vivas como subdirector. Luciana Troglio es la coreógrafa, asistida por Luna Ferrero. En diseño de vestuario está Rocío Florella (que además es co directora) con Bernarda Cestari colaborando en la realización, junto a Natalia Casenave. Hay un equipo encargado del calzado y otros detalles. Además, cada ala tiene delegados: Celeste Maratea y Paula Siri (el Conejo), Guillo Coleta y Karina Ayala (los Gatos), Calu Sosa y Lucila Villoslada (las Alicias), Marilina Retegui y Luján Biaggini (músicos/Sombrereros locos), Luciano Andújar (las Cartas) y Pablín Rodríguez y Valeria Gutiérrez (las Bahianas). Y Eva Mozzone nos ayuda en calzados. Este año somos 250 integrantes. En 2024 llegamos a ser 300, pero por cuestiones organizativas decidimos ajustar el número. Siempre apostamos a lo colectivo, al trabajo grupal, y agradecemos a cada persona que participa, ensaya con frío, con calor, con lluvia, pero sigue firme para que esto sea posible.
Con una puesta en escena que promete magia y asombro, Lesionados por el Corcho se prepara para una nueva edición del carnaval mercedino, reafirmando su identidad y su compromiso con la fiesta popular.
Como cada año, el corso será el escenario donde la murga, el ritmo y la creatividad se darán la mano para celebrar juntos la tradición del carnaval.