Para muchos desde hace un tiempo recorrer el dial de la radiofonía en Mercedes no era lo mismo. Faltaba algo. Una voz, una cadencia, una selección musical que parecía sacada de los viejos vinilos del alma.
Como si el éter se hubiera quedado sin una de sus voces más queridas, o como si un faro de la radiofonía mercedina hubiese apagado su luz. Pero ese silencio tiene fecha de vencimiento: Abel Macaluse, luego de un año fuera del aire, volverá con un nuevo programa, «Ayer nomás» –ex profeso, como la canción de Los Gatos– desde el 1 de agosto por FM Bello Horizonte 97.3 mhz.
«Ayer nomás / pensé vivir feliz mi vida. / Hoy comprendí / que era feliz ayer nomás»
LOS GATOS
Será todos los viernes, de 20 a 22, y promete ser mucho más que un programa de radio. Será un reencuentro. Un viaje. Una caricia sonora para quienes tienen en su memoria no solo canciones, sino épocas enteras.
«Ayer nomás» está pensado para albergar música de los años 60, 70, 80 y hasta de los 90. Se trata de un programa que busca un público fiel, muchas veces olvidado por las grillas veloces de hoy día, raras excepciones, pero que conserva intacta la emoción de una buena melodía, el recuerdo de un bolero, una anécdota de juventud ligada a una canción.
Desde su “vagón”, como él llama al estudio donde transmite, Macaluse vuelve a tender puentes entre el ayer y el presente. No es casual el nombre del programa. «Ayer nomás» tiene algo de tango, de nostalgia, de mirada hacia atrás pero con los pies bien puestos en el hoy. La idea no es solo musical: habrá posibilidad de shows en vivo, artistas invitados, y hasta transmisiones por streaming. Porque aunque el tiempo haya pasado, el espíritu de la radio —el de la buena radio— no envejece.
Abel Macaluse había anunciado su retiro. Pero la radio, esa compañera de madrugadas y sobremesas, sabe llamar. Y algunos regresos no necesitan explicación. Los oyentes lo esperaban. Algunos se lo cruzaban por la calle y preguntaban tímidamente “¿y, cuándo volvés?”. Otros, más directos, le dejaban un mensaje de voz o un comentario en su WhatsApp. La respuesta llegó ahora, como llegan las buenas noticias: sin estridencias, con la tranquilidad de quien vuelve a su casa.
“Ayer nomás” será, en definitiva, una invitación. A sentarse frente al parlante. A cerrar los ojos. A recordar. Y a disfrutar. Porque la radio, cuando es hecha con amor y memoria, nunca se apaga del todo. Solo espera el momento justo para volver a sonar.
