La histórica planta láctea La Suipachense, con más de 75 años de trayectoria, atraviesa una crisis sin precedentes que pone en riesgo su continuidad y genera gran preocupación en la comunidad local. Ante esta situación, el Municipio de Suipacha informó que mantiene un seguimiento cercano, en diálogo permanente con la empresa, el sindicato y autoridades provinciales, con el objetivo de encontrar alternativas que permitan sostener la producción y las fuentes laborales.
En las últimas horas se realizaron reuniones con representantes de la compañía, del gremio Atilra y del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, de las que participaron Mariela Bembi, secretaria de Industria; Ariel Aguilar, subsecretario de Comercio; y Andrés Rodríguez Reveles, subsecretario de Relaciones del Trabajo. “Nuestro compromiso es estar presentes y acompañar a la comunidad en este momento tan complejo”, expresaron desde el Ejecutivo municipal.
La crisis impacta de lleno en una ciudad de 12.000 habitantes donde la usina es motor económico central. La empresa, que quedó bajo control de sus 140 empleados por los atrasos salariales y deudas millonarias, hoy apenas recibe 40.000 litros de leche diarios, frente a los 250.000 litros que procesaba en sus mejores tiempos.
La crisis impacta de lleno en una ciudad de 12.000 habitantes donde la usina es motor económico central.
Según estimaciones, la planta necesita alrededor de $3.000 millones mensuales para operar, pero actualmente recauda solo $500 millones, lo que hace inviable cubrir salarios, proveedores y servicios básicos. El riesgo de corte de luz y gas amenaza con paralizar por completo la producción.
El grupo venezolano Maralac, que administra la firma desde 2015, calificó la actual situación como una “toma forzada” por parte del gremio y un sector de los trabajadores. Desde Atilra, en cambio, sostienen que la medida busca garantizar el pago de sueldos y el funcionamiento mínimo de la planta.
Fundada en 1947 como cooperativa, La Suipachense ha sido un emblema productivo y social en la región. Su futuro inmediato dependerá de que surjan inversores que permitan reactivar la producción y sostener la fuente laboral de cientos de familias.