La escena cultural de la ciudad se prepara para un cierre de año a puro color y técnica. Este domingo 21 de diciembre, a partir de las 19:30 horas, se llevará a cabo la Muestra Anual del Taller de Acuarela dirigido por el reconocido artista Juan Ferrandis. El evento tendrá lugar en las instalaciones del Movimiento Cultural El Limonero, ubicado en la intersección de las calles 27 y 34.
La exposición representa la culminación del ciclo de trabajo anual, donde los alumnos del taller exhibirán el dominio de una de las técnicas más exigentes y sutiles de las artes plásticas: la acuarela. El encuentro es una cita obligada para los amantes del arte, ofreciendo un recorrido visual que destaca por el juego de luces, sombras y transparencias propias del medio acuoso.
Artistas con sello propio
En esta edición, el público podrá disfrutar de las obras de un variado cuerpo de expositores, integrado por:
Marcela Guinot, Gabriela Oliva, Alejandra Arrieta, Laura Arenas, Viviana Codón, Jésica Gómez, María Lombardi, Juan Bonnet, Mario García, Liliana García, Paula Marchetti, Patricia Blas, Silvia Martínez, Bocha Blandini, Sergio López, Ayelén López Albini, Mariana Dulevich y el propio Juan Ferrandis.
El Limonero continúa consolidándose como el epicentro de la expresión artística independiente en Mercedes, brindando el marco ideal para esta exhibición colectiva.
Por su parte, Ferrandis —cuya labor puede seguirse en redes a través de @juan.ferrandis_acqua.art— ha logrado conformar un grupo heterogéneo que, bajo su guía, ha explorado diferentes estilos y temáticas que serán revelados este domingo.
La entrada es abierta a toda la comunidad, invitando a los vecinos a compartir una velada cultural que celebra el talento local y el aprendizaje artístico.
Un párrafo más para El Limonero, un espacio abierto disponible y autogestivo que pone al arte como necesario en medio de un clima social y cultural que no siempre está mirando y valorando la creación sino que lamentablemente pone el foco en lo contrario. Por algo las guerras siguen en pie en el mundo y el individualismo golpea la humanidad y la convivencia y el respeto. El arte es denuncia permanente por contrario a esto y vive en espacios saludables como el que lidera Pablo Russo con coherencia desde hace más de 20 años.