
Tras 30 años de ejercicio profesional marcados por la vocación y el compromiso ininterrumpido, el Dr. Sergio Botta se acogió a los beneficios de la jubilación, cerrando un ciclo fundamental en la historia reciente del Hospital Interzonal General de Agudos «Blas L. Dubarry».
El emotivo reconocimiento tuvo lugar en las instalaciones del centro de salud, donde sus compañeros del Servicio de Clínica Médica se reunieron para brindar una cálida despedida a quien fuera una figura central del equipo durante las últimas tres décadas.
Durante el encuentro, se resaltó no solo su pericia médica, sino especialmente su calidez humana y la huella que dejó en la formación de colegas y en la atención de miles de pacientes.
«La salud pública se construye entre todos, sin distinciones. Cada aporte diario se traduce en más y mejor salud para toda la comunidad», expresaron desde la institución, subrayando que figuras como la de Botta son las que consolidan el prestigio del hospital.
Una trayectoria de compromiso
El Dr. Botta fue testigo y protagonista de las transformaciones del Hospital Dubarry. Su paso por la clínica médica no solo se limitó a la labor asistencial, sino que estuvo definido por una «presencia cotidiana» que sus pares definen como esencial para el clima de trabajo y la calidad del servicio.
La dirección del hospital y el personal de salud coincidieron en destacar que la jubilación del profesional representa el fin de una etapa significativa para el sistema de salud local. «Gracias, Sergio, por formar parte de esta historia y por dejar huella. Te deseamos lo mejor en esta nueva etapa», concluyeron sus colegas en un mensaje que se replicó con afecto en toda la comunidad hospitalaria.
