Una gigantesca movilización de trabajadores participó de la celebración religiosa. En su homilía, el arzobispo Radrizzani condenó a los mercados financieros.
Cientos de miles de trabajadores participaron este mediodía frente a la Basílica Nacional de Luján de la Misa Ecuménica convocada por el Frente Sindical para el Modelo Nacional bajo la histórica consigna «Paz, Pan y Trabajo».
Mecánicos de SMATA y Camioneros fueron los sindicatos que exhibieron mayor poder de movilización en una mañana lluviosa: de acuerdo a la estimación de los organizadores, la concurrencia superó las 800.000 personas.
Ante la multitud, y una primera fila entre quienes se destacaban los líderes gremiales Ricardo Pignanelli (SMATA) y Hugo Moyano (Camioneros), el arzobispo de Mercedes Luján, Agustín Radrizzani, condenó a las “estructuras de pecado”.
El prelado se refirió a los “mercados financieros que generan plata para pocos y miseria para muchos”. “El dinero debe servir y nunca gobernar, es imprescindible que los pueblos construyan una alternativa humana a la globalización”, dijo en su homilía.
En el cierre de la celebración religiosa, representantes de diferentes credos compartieron una oración ecuménica que incluyó una aplaudida crítica a la “falta de presunción de inocencia”. Entre los participantes, la consigna más coreada fue “Unidad de los trabajadores”.
Fotos: Adrián Terrizzano