Desde la Comisión Municipal por la Memoria de Mercedes recordaron a Rosa y Carmen Carnaghi, madre e hija secuestradas por la dictadura un 4 de agosto de 1976.
ROSA HAYDEÉ CIRULLO de CARNAGHI: Detenida-Desaparecida el 4 de Agosto de 1976, a los 53 años de edad. Asesinada, Identificada y Recuperada.
Hija de José Cirullo y Carmen Aguirre, nació en Mercedes el 30 de Agosto de 1923. Los primeros años de su infancia transcurrieron en una vivienda de calle 19 esquina 24 donde su padre tenía almacén y despacho de bebidas. A raíz de la “crisis del 30” la familia se traslada a la Ciudad de Buenos Aires donde se radica definitivamente. Allí Rosa Haydeé conoce a quien luego fuera su esposo, Héctor Juan Carnaghi, notorio militante de la Resistencia Peronista. “La Tía Tota” como se la conocía en el ambiente político, era muy allegada al accionar de Dardo Cabo. Integró el Consejo Superior Peronista y fue Diputada.
Aún en los momentos más difíciles y de mayor tensión política y social, Haydeé supo conservar la templanza, elegir y decidir quien ser: una compañera comprometida con la realidad y las necesidades del pueblo. Su mirada humanística de la vida y sus firmes convicciones, le otorgaron la solidez moral y espiritual que la mantuvieron cerca de los humildes, dándole sobradas muestras de generosidad y solidaridad.
Pese a las reiteradas amenazas de la Triple A decidió quedarse en la Argentina. El 4 de Agosto de 1976 fue secuestrada en su domicilio de Villa Martelli, Provincia de Buenos Aires, junto a su hija Carmen María Carnaghi, que se negó a separarse de ella. Ambas fueron vistas en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) y luego en Coordinación Federal desde donde fueron sacadas y asesinadas el 20 de agosto y sus cuerpos dinamitados en Fátima –Partido de Pilar, Provincia de Buenos Aires– junto a otros 28 militantes políticos.
Sus restos fueron identificados por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) y desde el 16 de Diciembre del año 2000 madre e hija descansan en el Cementerio de Mercedes.
También se colocó una placa recordatoria en memoria de las víctimas en una plazoleta ubicada de calle Alberti, entre Cochabamba y bajada de la Autopista 25 de Mayo.
«En la memoria viva de quienes la conocieron hoy se recuerda a Rosa Haydée como una persona virtuosa, solidaria y muy querida, que nunca será olvidada porque forma parte de la historia y de la memoria viva de nuestro pueblo. Sostenemos la memoria como un permanente recuerdo, homenaje y reivindicación a nuestros 30.000 compañeros detenidos desaparecidos y asesinados por el Terrorismo de Estado”, remarcaron desde la Comisión Municipal por la Memoria de Mercedes
CARMEN MARÍA CARNAGHI: Detenida-Desaparecida el 4 de Agosto de 1976, a los 25 años de edad. Asesinada, Identificada y Recuperada.
Hija de Héctor Juan Carnaghi y de Haydeé Cirullo, nació en Buenos Aires el 6 de Noviembre de 1950. Peronista como sus padres. Su vocación de servicio la llevó a desempeñarse como maestra de adultos en la Escuela San Andrés, dependiente de la Parroquia San Benito de Capital Federal.
También víctima de la represión Carmen fue secuestrada-desaparecida a la edad de 25 años, junto a su mamá, el 4 de Agosto de 1976. Sus restos aparecieron diseminados luego de una explosión activada por miembros de la Policía Federal, en lo que se denominó la “Masacre de Fátima” ocurrida en la Localidad de Pilar, Provincia de Buenos Aires, el 20 de agosto del mismo año.
Víctimas de la masacre de Fátima, 30 personas detenidas ilegalmente en la Superintendencia de Seguridad de la Policía Federal –conocida como Coordinación Federal– fueron trasladadas hasta el kilómetro 62 de la ruta 8, en Fátima, Partido de Pilar. Allí, atados y vendados, se les disparó con armas de fuego en la cabeza, y luego se hizo detonar un artefacto explosivo que esparció los cadáveres.
La identificación de las víctimas señaló el comienzo de la reconstrucción histórica. El Equipo Argentino de Antropología Forense logró rescatar verdades a la impunidad con la identificación de los restos óseos por medio del análisis genético. La justicia ordenó la devolución de los cuerpos a sus familiares y consideró que los delitos que quedaron involucrados en la “Masacre de Fátima” fueron crímenes de lesa humanidad, en consecuencia, imprescriptibles.
«Sostenemos la memoria como un permanente recuerdo, homenaje y reivindicación a nuestros 30.000 compañeros detenidos desaparecidos y asesinados por el “Terrorismo de Estado”, plantearon en pedido de Memoria, Verdad y Justicia desde la Comisión Municipal por la Memoria de Mercedes.