Las inspecciones del Senasa fueron realizadas por agentes del Centro Regional Buenos Aires Norte en la localidad de Olavarría y pueblos aledaños.
Continuando con las tareas de control sanitario a campo y dando cumplimiento a la normativa del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), veterinarios del organismo prosiguen con sus acciones de prevención sanitaria, recorriendo los remates feria y vacunando cada una de las tropas presentadas con fines comerciales.
Es así que en la jurisdicción del Centro Regional Buenos Aires Norte, se inspeccionó tanto la hacienda y camiones “jaula” ingresados en cada uno de los predios, como la aplicación de la caravana oficial y la realización de los sangrados en las distintas tropas en el país, de acuerdo a lo indicado por el Plan Nacional de Control y Erradicación de la Brucelosis Bovina.
“En todos los remates –tanto los realizados en Olavarría, como en las otras ciudades–, los veterinarios del Senasa de cada localidad realizamos los controles sanitarios correspondientes a las distintas categorías de animales ingresados, controlando los sangrados por brucelosis, la aplicación de la caravana oficial, el lavado de los camiones, además de las inspecciones oculares y chequeo general para corroborar que el bovino no tenga alguna lesión por fuera de lo esperado”, explicó Fabio Rubino, veterinario local en Olavarría.
Estos controles en los remate feria representan uno de los eslabones que integran la cadena agroalimentaria y permiten, por un lado, posicionar a nuestro país como uno de los principales proveedores de carne bovina de calidad al mundo, por el otro, resguardar la salud pública al garantizar que los productos que ingresan al circuito comercial son sanos e inocuos
