«La oferta de viviendas construidas bajó a sus peores niveles históricos durante los últimos 4 años”, remarcó el ministo de Infraestructura de la provincia de Buenos Aires, Agustín Simone.
«El objetivo es llegar a un piso de 8.000 viviendas por año e incluso superarlo y alcanzar 10.000 anuales”, dijo el funcionario.
«No estamos para nada de acuerdo con cualquier tipo de toma porque además de dificultar las cosas, no ayuda en lo más mínimo y la mejora habitacional hay que hacerla planificada, realizar las obras y después que vaya la gente de forma correcta”, opinó luego sobre el polémico tema de las usurpaciones ilegales y la toma de terrenos en la provincia.
Por otra parte, sobre obras a realizarse indicó que «el Plan Quinquenal de Obra Pública sirve como una locomotora que empuja y atrás viene el sector privado»: «El Estado es el que genera ese empuje que después permite que el sector privado asuma el riesgo de invertir en el país. Nosotros queremos dar certezas”, indicó el ministro.
