Mediante una “Carta abierta por la educación pública”, la concejala Marilina Bustelo, del Frente Juntos por el Cambio, propuso algunas ideas en torno al regreso a las clases en este año lectivo.
“La pandemia que atravesamos durante todo el año 2020 -y que nos seguirá acechando al parecer buena parte del presente año- ha dejado en descubierto la realidad de la educación Argentina y la deuda del estado con un sector de la sociedad tan sensible como lo son docentes y estudiantes”, dijo en principio la edil.
“Durante todo el año pasado docentes y familias han realizado un gran esfuerzo para intentar dar continuidad pedagógica y llegar con los contenidos propuestos a cada niño, niña o adolescente, en muchos casos asumiendo roles para los que no estábamos preparados y afectando por sobre todo la funcionalidad familiar”, remarcó.
“La virtualidad ha sido una herramienta para acompañar el proceso educativo, pero bajo ninguna circunstancia podemos pesar en ella como el remplazo de las aulas y las relaciones personales que se crean tanto entre el alumnado como con docentes. Aun si pensáramos en el peor escenario y nos encontráramos con la imposibilidad de volver a las aulas, manteniendo como sistema principal la virtualidad, dejaríamos a un altísimo porcentaje de alumnos y alumnas por fuera del sistema, aumentando así la brecha de desigualdad y oportunidades”, marcó luego y en relación a esto destacó un informe presentado en octubre pasado por UNICEF, realizado en base a una encuesta rápida de 129 preguntas hechas a 2.678 hogares, representando a un total de casi 27 millones de habitantes, que refiere que “… el 18% de los y las adolescentes no cuenta con acceso a Internet en sus hogares, un porcentaje que se incrementa al 21% entre estudiantes de escuelas estatales y que afecta al 28% de los jóvenes entre 13 y 17 en hogares destinatarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH). Asimismo, el 37% de los encuestados afirma que no dispone de una computadora o tableta para realizar sus tareas escolares, aumentando al 44% de los estudiantes de establecimientos estatales y al 53% de quienes perciben la AUH”.
“Debemos darle a la educación una importancia real, ponernos a cuestionar las decisiones ya tomadas, no van a volver el tiempo atrás, pero si hay que decirlas. Podemos y debemos pensar, y proponer ideas que pongan a la educación pública en primer plano, para llegar a la presencialidad sin olvidarnos de la situación de pandemia que estamos atravesando. Y para eso hay que escuchar a los que saben, a aquellos que todos los días se ponen un delantal y van a dar clases y se preocupan por que otro aprenda, porque para realizar esa tarea se estudia”, dijo.
“El Gobierno y la oposición debemos ponernos a trabajar, pensando en la educación como un bien esencial, como un derecho humano y un bien público, unos proponiendo qué hacer, los otros evaluando las mejores opciones a realizar, para llevar a cabo. Todos estamos de acuerdo de la necesidad de la presencialidad en la escuela, pero hay que dejar de pedir medidas generales, porque estamos en una pandemia”, expresó Bustelo.
“Deben estar dadas las condiciones para que a cada docente en el aula se lo provea de los materiales de cuidados necesarios, que las instituciones puedan dar la seguridad e higiene que amerita y que los niños tengan transporte para poder llegar a ellas”
“Sin duda la presencialidad es lo que nos acerca a una verdadera educación de calidad… pero la presencialidad no es a cualquier precio”, dijo.
“Deben estar dadas las condiciones para que a cada docente en el aula se lo provea de los materiales de cuidados necesarios, que las instituciones puedan dar la seguridad e higiene que amerita y que los niños tengan transporte para poder llegar a ellas”, afirmó la edil de JxC y partiendo de la base de que todos estamos de acuerdo sobre dos puntos (la Educación como derecho esencial, y la necesidad de la presencialidad en las escuelas) sostuvo que se debe pensar qué podemos proponer para que eso se lleve a cabo, porque “en mayor o menor medida la Educación Pública, como todo lo público, es responsabilidad de todos”.
Ante estos puntos planteados y luego de reunirse con algunos docentes planeó estas ideas y propuestas:
- Asegurar la presencialidad en instituciones rurales donde hay mayores espacios de ventilación y posibilidades de respetar el distanciamiento. Ya que es la zona donde se encuentra la mayor falta de conectividad, por falta de insumos necesarios (internet, tecnología, etc.), las autoridades deberán proveer, barbijos, alcohol, lavandina, máscaras y termómetro digital para medir la temperatura.
- En instituciones de doble jornada asegurar la presencialidad separando el alumnado en dos turnos y permitiendo en el tiempo intermedio la limpieza de los espacios. Las obligaciones de las autoridades serán las mismas que en la propuesta anterior.
- En las instituciones donde las condiciones edilicias no permiten la presencialidad del 100% del alumnado, tendrán prioridad de asistencia aquellos alumnos que no hayan podido realizar las clases de forma virtual por lo que se ha vista impedida la vinculación con la institución. Podrán hacerlo tres veces a la semana, luego tendrán un día para que el/la docente pueda comunicarse con los demás alumnos de forma remota. Y un día para que estos alumnos asistan a la escuela y no pierdan el contacto con sus pares. Las obligaciones de las autoridades son las mismas que con las demás propuestas.
“Dejo en claro que no soy experta en Educación pero mi función es proponer ideas que intenten solucionar problemas cotidianos de los ciudadanos de nuestra ciudad y que lleven al gobierno de turno, la oposición y a las autoridades educativas a sentarse, pensar y proponer soluciones en un año donde lo primordial es construir desde el consenso en los puntos que tengamos en común, en beneficio de nuestra comunidad”, completó Marilina Bustelo, concejala de Juntos por el Cambio.
