Un niño que se había ahogado con comida y que perdía signos vitales fue salvado esta tarde por agentes de Policía Vial que le brindaron la primera atención y por un veloz operativo que movilizó a todas las fuerzas de seguridad para el inmediato traslado del chico al Hospital Dubarry.
El menor, de una edad cercana a los dos años, fue llevado por su mamá a las 16.30 horas hasta el Destacamento ubicado en Avenida 40 y Ruta 41. Se había atorado con una porción de milanesa en su vivienda cercana al lugar, no podía respirar y su piel tomaba un color morado.
La Sargento Jessica Pauli, raudamente pero sin perder la calma, practicó sobre el niño la maniobra de Heimlich.
La Sargento Jessica Pauli, raudamente pero sin perder la calma, practicó sobre el niño la maniobra de Heimlich, al tiempo que sus compañeros alertaban por radio sobre la situación. En instantes, la Policía Comunal cortó el tránsito en el trayecto hasta el nosocomio.
De este modo, el niño pudo viajar a toda velocidad hasta el centro de salud, en el que recibió urgente atención médica. Quedó internado en el área de Pediatría, en buen estado, informó a Noticias Mercedinas el director del Hospital, Pablo Cassiani.
Consultado por este medio sobre el caso, el secretario de Seguridad del Municipio, Gonzalo Anselmo, destacó la importancia de la capacitación del personal policial en RCP y primeros auxilios. “¡Eso salva vidas!”, expresó.
El funcionario felicitó a todo el personal interviniente, tanto del Destacamento Vial como de la Policía Comunal, que “se enfrenta a diario con situaciones imprevistas y de extrema tensión, donde es fundamental proceder con pericia y eficacia”.
