Cada vez con más fuerza muchos padres y algunos consejeros escolares que toman el reclamo como propio solicitan ponerle fin al uso de barbijos en las escuelas del distrito.
El reclamo ha sido realizado en distintos ámbitos y toma fuerza en Mercedes, por lo que clon la baja de casos en el marco del paso de pandemia a endemia del coronavirus y dado el avance de la vacunación, desde Juntos por el Cambio el consejero escolar Agustín Ferrarotti pide “cuidado y coherencia” en esta situación que se vive en establecimientos educativos.
“Nos hemos encontrado con varias familias en distintos puntos de la ciudad pidiendo o defendiendo los derechos de sus hijos. Puntualmente solicitan que los pequeños no deban utilizar barbijos en la escuela”, dijo al respecto y comentó que estos padres y madres se han presentado en el Consejo Escolar, en las distintas Inspecciones escolares y en otras dependencias con el único motivo de ser escuchados: “Sin duda es una situación compleja, no de solución inmediata pero que debe ser tenida en consideración”, opinó Ferrarotti, e indicó que el planteo fue discutido en el bloque de consejeros que integra.
“La petición tiene fundamentos médicos, psicológicos y sociales, teniendo en cuenta que las condiciones sanitarias han mejorado mucho y los niveles de vacunación son respetados. Sin duda la decisión de protocolos sanitarios es de carácter colectivo, pero no debería coartar libertades individuales en la crianza y cuidado de los hijos como así lo pueden interpretan estas familias, sin dejar de lado su posibilidad de escolarizarse con todo lo que ello implica”, agregó el consejero de Juntos.
«Medidas similares ya se han tomado en otros lugares de nuestro país atendiendo a las necesidades pedagógicas y entendiendo que en este nuevo contexto sanitario la medida tendrá un efecto positivo en las tareas de enseñanza, aprendizaje y sobre todo comunicación»
“El cuidado sobre la situación sanitaria que hemos vivido los últimos 2 años ha sido extremo. A la pandemia y sus consecuencias, forzadas o aceptadas, las hemos sufrido en todos los ámbitos sociales. La escuela no ha sido la excepción. Y es tiempo de dar mejores y mayores respuestas a nuestros niños. Las distintas instancias gubernamentales no tienen la coherencia que le piden a nuestros niños. En la escuela tenemos que pensar si estas medidas no dificultan las prácticas de alfabetización, vinculadas con la oralidad, por ejemplo. O en cuáles de sus etapas de escolaridad pueden tener mayores dificultades o presentar obstáculos para su desarrollo lingüístico”, indicó.
“Este importante grupo de familias pide mayor coherencia en las medidas adoptadas y siempre pensando en el cuidado de sus hijos. Medidas similares ya se han tomado en otros lugares de nuestro país atendiendo a las necesidades pedagógicas y entendiendo que en este nuevo contexto sanitario la medida tendrá un efecto positivo en las tareas de enseñanza, aprendizaje y sobre todo comunicación”, concluyó Ferrarotti.