La atleta paralímpica Romina Fernández ya tuvo su primer Panamericano en Perú y llegó a la máxima cita del deporte, el Juego Olímpico de Tokio de donde se trajo dos diplomas. A partir mañana, sábado 20, emprenderá un viaje más y será a continente europeo donde estará hasta mediados de junio en dos torneos evaluativos en representación de la Argentina y FADEPAC.
“Estoy menos nerviosa, esto no es tanto como lo de Tokio” contó la deportista mercedina quien llegó este viernes al CENARD para ser acompañada por su madre María López, su hermana Roxana Fernández y Alejandro Russo. Ya en la ciudad de Buenos Aires superó el hisopado y pasará la noche a la espera de subirse al avión en la mañana del sábado.
Romina estará acompañada por el Lisandro Muhoberac y el atleta Hernán Barreto, los dos de la FADEPAC, tomando parte del 20 de mayo al 13 de junio de dos certámenes que le permitirán revalidar su categoría F 32 en el lanzamiento de la clava y bala. El primer destino es la ciudad de Nottwil (Suiza) y más tarde París (Francia).
“Vengo bien en los entrenamientos, tengo algunos lanzamientos de clava de más de 20 metros, también estuve en un torneo en el CENARD” ocurriendo esto días atrás donde llegó a los 18 metros 88 centímetros, aunque su mejor registro lo tiene en Tokio con 19 metros 43 centímetros. Romina buscará sumar experiencia y quedar habilitada para futuros compromisos deportivos.